Instantánea

Los viajes que realiza Marcela Larraín Díaz Pumará no sólo resultan llamativos por el empeño que pone en volver a recorrer las rutas y trayectos en los que se forjaron en gran medida los destinos de la Nación, sino también porque ella es una fanática de realizarlos en total soledad y en transportes poco adaptados para estos tipos de rutas. Hasta San Lorenzo llegó en un velero sin motor y sólo fue remolcada por la Prefectura en los últimos tramos. En esa misma embarcación de dimensiones significativamente pequeñas llegó también hasta las Islas Malvinas y sufrió un naufragio en la bahía de Samborombón mientras hacía el recorrido. Además, dentro de la misma embarcación viajan algunas piezas históricas que durante sus viajes y visitas a diferentes ciudades, recolectó para armar una suerte de museo ambulante.