Año CXXXVII Nº 48306
Política
La Ciudad
Información Gral
Opinión
La Región
El Mundo
Policiales
Campo
Cartas de lectores


suplementos
Ovación
Escenario
Economía
Señales
Turismo
Mujer


suplementos
ediciones anteriores
Educación 21/02
Campo 21/02
Salud 18/02
Autos 18/02


contacto

servicios

Institucional

 domingo, 22 de febrero de 2004

Niñez en riesgo. La Comisaría de la Mujer recibe 60 denuncias por mes
Advierten sobre el aumento de casos de violencia sexual contra los menores
"Llegamos después de que el hecho pasó, pero buscamos que no se repita" dice la jefa del área

Isolda Baraldi / La Capital

La responsable del Centro de Asistencia a la Víctima del Delito Sexual de la policía (Comisaría de la Mujer), Mariel Arévalo, advirtió sobre el incremento de las denuncias por abusos que involucran a chicos. Mientras que durante todo el 2002 se habían registrados 281 casos de niños víctimas de violencia sexual (65 de ellos agravados), los datos hasta mitad del año pasado arrojan un total de 150 chicos victimizados.

"Lamentablemente llegamos después de que el hecho ocurrió en esta clase de delitos, pero al menos intentamos que no vuelva a suceder", confesó Arévalo, quien atiende por mes aproximadamente unas 60 denuncias sobre violencia familiar y delitos sexuales en el edificio de Italia 2153.

La funcionaria advirtió que los chicos son victimizados en su gran mayoría dentro del entorno familiar, y también -aunque en menor medida- en las escuelas. "Por decirlo de alguna manera, generalmente son personas que los menores conocen", abundó.

En todo momento la policía remarcó que su repartición es sólo auxiliar de la Justicia, y además recordó que los delitos sexuales están tipificados dentro del ámbito privado por lo que en los casos de los menores deben ser sus padres o tutores quienes realicen las denuncias. Aunque como las leyes internacionales ponen el interés del niño en primer lugar se pueden recepcionar denuncias de terceros mediante las fiscalías o los Juzgados.


Casos que se repiten
Arévalo admitió que desde la repartición no se brinda a los chicos atención terapéutica, aunque recalcó que desde allí se derivan niños. "Es indudable que necesitan asistencia y, aunque por fuera de nuestro accionar, tratamos de que sean asistidos en sitios cercanos a sus domicilios", explicó.

La funcionaria policial dijo que existen muchos casos de violencia sexual que se repiten en la misma familia. "Cuando comenzamos las investigaciones y a partir de los relatos que ofrecen las víctimas surgen en muchos casos situaciones de abusos o violencia anteriores; es decir, sus madres también sufrieron casos así. Es probable que una mamá haya sido abusada por su padrastro y con el tiempo el mismo hombre abusa de su hija, pero en su momento no se hizo la denuncia y el grupo familiar continuó junto", confió.

En ese marco, acotó que cada caso es particular y se hace un relevamiento de todo el entorno familiar. "Es cierto que la miseria y la marginalidad potencian estos delitos. A veces por el hacinamiento, o por otras cuestiones culturales, pero que quede claro que atraviesan a todas las clases sociales", remarcó Arévalo.

Claro que el trabajo con los chicos abusados no es sencillo. Es decir, la actividad de estas policías mujeres dista mucho del funcionamiento cotidiano del resto de las comisarías. "Jamás ponemos un chico frente a una computadora, tenemos lápices de colores, a veces estamos horas jugando y tratamos de contenerlo. Es fundamental el relato de los nenes o nenas para poder actuar en consecuencia", explicó.



enviar nota por e-mail

contacto
buscador

Ampliar FotoFotos
Ampliar Foto
Arébalo: los abusadores son personas conocidas por los niños.

  La Capital Copyright 2003 | Todos los derechos reservados