Sirve para empezar

Central Córdoba sacó un buen punto en el debut

Mauricio Bartoli / Ovación

Central Córdoba logró empatar de visitante ante Flandria, uno a uno. Así, si bien ayer mostró más condiciones físicas que futbolísticas, inició con el pie derecho el torneo Clausura de Primera B. Porque un punto fuera de casa siempre es importante y suma. Pero también porque sobre el final del partido quedó la sensación de que eran los charrúas los que querían más.

El equipo de Tablada salió a buscar un buen resultado desde el arranque pero durante la primera etapa no supo cómo llegar con peligro al arco rival. Tras el entretiempo se dejó acorralar y tras un cuarto de hora de insistencia, los canarios de Jáuregui se pusieron arriba en el marcador. Parecía que los dirigidos por Miguel Isabella no tenían capacidad de reacción pero en base a un mejor rendimiento atlético que sus rivales pudieron armar jugadas de ataque y llegaron a la igualdad.


En estado pero sin lastimar
En los primeros minutos del partido los de Tablada impusieron su movilidad, aunque recién a los 22' se produjo una pared interesante entre Petrovelli y Marinelli, que terminó con un fuerte disparo del centrodelantero Silvio Díaz. Pero el arquero Gastiardo estaba bien parado.

A los 37' volvió a apurar Central Córdoba y obligó a dos salvadas en la línea. Un manotazo del arquero hizo rebotar la pelota en el travesaño después de sucesivos cabezazos de Farre y Marinelli que paralizaron los corazones de los hinchas por más de cinco eternos segundos.

Los charrúas llegaban más armados, con dos o tres hombres en posición de ataque pero les faltaba profundidad. Se extrañaba, por ejemplo, a los emigrados Cela Ruggieri y Ferri.


Caída y remontada
En el complemento Flandria salió a comerse la cancha, que por cierto estaba muy poceada y en algunas partes sin pasto, después de haberse realizado allí un recital de Los Nocheros el domingo pasado.

De todos modos, los locales apretaron como pudieron. Tras varios tiros de esquina y centros cortos que motivaron varios revolcones de Cancelarich, un rebote le quedó en la puerta del área al mediocampista Del Papa, que la acomodó con tres dedos, a rastrón, sobre el palo izquierdo de Cancelarich, que nada pudo hacer.

El uno a cero era, hasta ahí, coherente con el mayor ímpetu de Flandria. Pero los de Tablada sacaron a relucir su orgullo y a los 73' el ingresado Arman la metió de cabeza al ángulo, tras un tiro libre indirecto que había sido fabricado por Guffanti. O sea, dos de los tres reemplazantes dispuestos por Isabella, lograron remontar la cuesta.

Diez minutos después se escapó Armani por la izquierda pero cuando quiso cruzarla para la entrada de Díaz, un defensor amarillo despejó justo. De esa manera, con Central Córdoba atacando, con más piernas para buscar la victoria, se jugaron los últimos minutos. Por eso, tras el pitazo final de Sugliani los que aplaudieron fueron las decenas de hinchas y varios miembros de la comisión directiva charrúa, que se quedaron con una imagen digna de su equipo.

Armani marcó el gol del empate charrúa.