Tuvo efectivo

Tiro pagó con goles su pobre labor en un triunfo clave

Elbio Evangeliste / Ovación

El resultado le terminó dando la derecha a un Tiro Federal que se jugaba mucho más que tres puntos. Es que la victoria por 3 a 1 ante Gimnasia y Esgrima de Concepción del Uruguay, rival directo por el descenso, disimula el apenas discreto funcionamiento del equipo del Indio Solari. Porque las situaciones de gol no abundaron. Porque en el primer tiempo al equipo de Ludueña le costó horrores aproximarse al arco rival con pelota dominada. Porque para llegar al objetivo en los partidos que la realidad así lo imponga -sobre todo en condición de local-, habrá que barajar como posibilidad un esquema con dos delanteros. Todos temas para el análisis frío de la semana. Lo que no dio para la discusión fue la gran efectividad de los Tigres. Tres goles en un partido mal jugado no es cosas de todos los días.

El oportunismo de Mario Pierani y la desesperación del Lobo entrerriano en los últimos 15 minutos fueron el marco de una tarde en la que, hasta que la visita no perdió las marcas, Tiro se mostró como un equipo demasiado livianito para lo que estaba en juego. Basta con echarle un vistazo a las situaciones de gol y ver que la primera apareció recién a los 41' tras un desborde de Chitzoff por derecha y posterior asistencia de Walter Paz para Romano, quien la tiró afuera.

Es que hasta allí la asfixia que sufrió el Pescadito de parte de Vázquez y la marca escalonada de Marczuk y Boujón para con Javier García echaban por la borda el esquema de Solari. Pero para alegría de todo Ludueña, sobre el cierre de la primera etapa Pierani ajustició a Llinas tras la conjunción de talento y garra del Chueco García y la simpleza de Paz.

Como para no estar contentos. Su equipo andaba con el pie cambiado y encima ganaba. Pero si bien Gimnasia no hacía mucho más, Tiro sufrió bastante. El circuito en el medio se fue cayendo y, ante la dificultad de que un solo delantero las aguante a todas, la cancha se fue inclinando hacia el arco de Misetich. Por eso Noce salvó sobre la línea cuando Jeandet había tocado sobre el uno tirolense. Por eso el propio Misetich tuvo que exigirse al máximo en el mano a mano con Fiorotto.

Pero se veía venir lo que nadie quería. Saboredo la clavó en el ángulo ante la mirada de los defensores y la infructuosa salida de Misetich. Por eso el silencio. Ahí sí Solari se dio cuenta de que el local era Tiro y mandó a la cancha otro delantero. El ingreso de Vacaría no fue determinante, pero ayudó para que el equipo se parara unos metros más adelante. Y en medio de esa imagen difusa que estaba dando Tiro apareció otra vez Pierani para anticiparse a Contreras y meter un testazo letal. Después, el gol de Vacaría no hizo otra cosa que bajarle por completo los brazos al Lobo.

La baja producción fue subsanada por tres goles que permitieron que Tiro hoy respire más aliviado en cuanto al promedio. De última lo más importante, pero siempre hay cosas por corregir. La puesta en escena de ayer no hace más que confirmarlo.

Pierani dedica su primer gol a la tribuna.