| miércoles, 04 de febrero de 2004 | Ecuador retiró a su embajador en Buenos Aires La rápida respuesta del gobierno de Ecuador a la Argentina al retirar ayer a su embajador en el país, Germánico Molina, involucrado en el episodio que puso fin al arresto domiciliario del ex represor Guillermo Suárez Mason, evitó un conflicto diplomático entre ambas naciones.
El canciller ecuatoriano, Patricio Zuquilanda, confirmó ayer el retiro de su embajador en Buenos Aires por pedido del Ejecutivo nacional, y aseguró que "este tipo de incidentes no puede de ninguna manera afectar la amistad entre las dos naciones".
Según un fax anónimo que llegó a las manos de Bielsa, Molina trasladó en su auto oficial a Suárez Mason a una fiesta organizada por su cumpleaños el pasado 23 de enero, circunstancia que el diplomático ecuatoriano negó, aunque sí admitió haberle llevado un "presente" de parte de un amigo en común.
Durante una rueda de prensa en el Palacio San Martín, el canciller Rafael Bielsa se refirió con ironía a la situación del embajador ecuatoriano: "En este momento está en un avión rumbo a Quito y me imagino que su situación personal es conseguir trabajo".
Sin embargo, de inmediato Bielsa destacó "la profesionalidad con la que trabajó la Cancillería ecuatoriana".
Al respecto relató que "a los 15 minutos de la conversación" con Zuquilanda, quien se encontraba en la reunión de gabinete encabezada por el presidente de ese país, Lucio Gutiérrez, "el embajador ecuatoriano en la Argentina ya había cesado" en sus funciones.
A partir de este hecho, la embajada en Buenos Aires quedó a cargo del cónsul general, Alfonso Morales Suárez.
Zuquilanda adelantó que investigarán "inmediatamente" a Molina y "tan pronto como llegue a territorio ecuatoriano tendremos las consultas políticas y jurídicas necesarias para determinar su nivel de responsabilidad en este hecho".
Luego sostuvo que el retiro de Molina de la representación diplomática en Buenos Aires "ha sido la mejor manifestación y respuesta del presidente Gutiérrez y de su gobierno frente a esta situación".
Por su parte, el presidente del Congreso, Guillermo Landázuri, se manifestó "indignado" por el episodio que involucra al ahora ex embajador Molina y anunció que colocará en la agenda legislativa la discusión del hecho. enviar nota por e-mail | | |