Dos periodistas procesados por extorsión

Los acusan de chantajear a un empresario para no publicar en su contra. La defensa habla de injusticia y apelará

Santa Fe.- El juez de Instrucción Rubén Saurín dispuso el procesamiento de los periodistas Pablo Benito y Luis Moro por el presunto delito de tentativa de extorsión contra el empresario del transporte Daniel Vidal, mientras que dictó falta de mérito a la periodista Claudia Moreno. Benito y Moro son responsables de la revista independiente "Tercer Mundo". Moreno es colaboradora de esa publicación.

El defensor de los periodistas, Jorge Pedraza, le confirmó a La Capital que es muy factible que apele la medida. El pasado 31 de diciembre los periodistas fueron detenidos en un restaurante ubicado en General López y 1º de Mayo, a una cuadra de la Legislatura y dos de la Casa de Gobierno, en un procedimiento cumplido por efectivos de las Tropas de Operaciones Especiales (TOE). Uno de los periodistas tenía en sus manos un sobre, entregado por Vidal, quien se encontraba con ellos. Dentro del sobre había cinco mil pesos en billetes marcados por disposición de Saurín.

Posteriormente se sabría que el empresario había denunciado a los periodistas sosteniendo que intentaban extorsionarlo a cambio de no seguir proporcionando información que podría involucrarlo y relacionada con la situación del transporte urbano de pasajeros sobre la que venían ocupándose en "Tercer Mundo".

Las TOE también grabaron varias conversaciones telefónicas en la que mientras los periodistas hablaban de información, Vidal hacía referencia a "la plata". Cuando Benito y Moro fueron dejados en libertad el 6 de enero sostuvieron que ellos interpretaban a la palabra "plata" como una clave para no hacer referencia explícita a un presunto aporte documental del empresario, con el que podría incriminar a personas ligadas al transporte urbano.

Tanto los periodistas como el abogado defensor sostuvieron que se les había querido tender "una cama" y dirigieron sus críticas al subsecretario de Seguridad Pública, Alejandro Rossi, quien antes de asumir sus actuales funciones se desempeñaba como asesor letrado de la Unión Tranviarios Automotor (UTA), seccional Santa Fe.

Rossi aclaró en sede judicial que mantiene "una enemistad manifiesta" con los periodistas y reconoció que antes de que Vidal hiciera la correspondiente denuncia ante Saurín, mantuvo una reunión con el empresario quien, según sus palabras, le comentó que estaba siendo objeto de una extorsión.

Los periodistas sostuvieron a su vez que, aunque lo hubiesen querido, no tenían manera de extorsionar a Vidal puesto que todo cuanto sabían sobre él ya lo habían volcado en la revista. El mismo argumento sostuvo Pedraza en su defensa, argumento que el juez "no tomó en cuenta", según le dijo ayer a este diario.

El abogado defensor consideró "injusto" el auto de procesamiento y reiteró que para él todo el episodio refiere a una "cama". Sostuvo que sus representados carecen de aptitud para intimidar y no le reconoció "carácter de intimidado" a Vidal. A Pedraza le resultó sugestivo que se haya tardado "sólo 15 horas" en realizar el operativo. "Se montó un operativo propio del Primer Mundo por una presunta extorsión de cinco mil pesos", afirmó.

Confirmó que hubo "por lo menos dos" reuniones previas al encuentro del 31 de diciembre entre Benito, Moro y Vidal y aceptó que en el expediente aparece el nombre de Mario Galizzi, comerciante santafesino y dirigente de Apyme. Pedraza no descartó que Galizzi "haya servido de nexo" entre los periodistas y Vidal, puesto que éste formó parte de Apyme. Respecto de las grabaciones, expresó el letrado que en ellas sus defendidos "se limitaban a contestar sólo con monosílabos o interjecciones" y que en ningún caso hablaron de dinero. También sostuvo que la grabación tomada en el restaurante "es muy confusa".

Los periodistas de Tercer Mundo.