Solá dijo que el lanzamiento electoral de la primera dama "va en serio"

Cristina agita las aguas del PJ bonaerense

El kirchnerismo intenta bajar los decibeles sobre una eventual candidatura de la esposa del presidente

Funcionarios nacionales, incluido el mismo que 24 horas antes había instalado la polémica, le bajaron ayer el tono a la posibilidad de que la primera dama, Cristina Fernández de Kirchner, sea candidata en territorio bonaerense, tradicionalmente dominado por el duhaldismo. Sin embargo, el gobernador de ese distrito, Felipe Solá, consideró que el lanzamiento de la senadora "va en serio".

El jefe de Gabinete, Alberto Fernández, relativizó la posibilidad de que la esposa del presidente Néstor Kirchner compita por un cargo electoral en Buenos Aires. "Nosotros estamos muy preocupados por gobernar, y hay que quitarle a la gente sensaciones confusas de que puedan haber enfrentamientos internos o cosas por el estilo", explicó.

"Cristina nació en La Plata, pero está tan contenta de ser una representante del pueblo de Santa Cruz que, la verdad, debo confesar que nunca conversé con ella sobre ese tema", enfatizó Fernández. Sin embargo, fuentes legislativas a las que accedió La Capital admitieron que en el Congreso "se habla mucho del binomio Cristina-Aníbal Fernández" para el futuro.

El jefe de Gabinete relativizó las afirmaciones del subsecretario general de la Presidencia, Carlos Kunkel, quien había admitido que la primera dama podría pelear un cargo electoral en el importantísimo distrito bonaerense.

Al insistírsele sobre si el proyecto de la senadora es poner un pie en Buenos Aires para estudiar cuál podría ser su performance en las próximas elecciones, evaluó que "ella está muy arraigada a Santa Cruz y no sé si tendrá idea de cambiar".

"Cristina es una dirigente muy ponderada y reconocida socialmente. Alguna vez yo también la quise traer a la ciudad de Buenos Aires, pero ella se negó", recordó el jefe de Gabinete.

Solá no dudó en enfatizar que "va en serio" la posibilidad de que la senadora se lance como candidata y, tras afirmar que es "bueno que haya competencia" en ese distrito electoral clave, sostuvo que Hilda Chiche Duhalde "no va a temblar" por esta alternativa.

"Me parece que va en serio. Creo que estas cosas no se dicen porque sí y que hay una intención de fondo. Pero es bueno que se digan y se blanqueen", reflexionó el mandatario bonaerense.

Solá también desestimó que esta posibilidad cause enojo en la ex primera dama, quien ya se anotó en la carrera por la Gobernación bonaerense, que se definirá en el 2007. "Chiche no va a temblar respecto de su actual prestigio en el conurbano o en distintos lugares porque se diga una cosa así", puntualizó el gobernador. Y, por el contrario, consideró positivo que "se genere un debate con los que están en el mismo partido".

Luego fue categórico: "Si me preguntan si eso (la eventual candidatura de la primera dama) es malo o bueno, yo diría que es bueno que haya competencia para mejorar la calidad (de la dirigencia)".

Kunkel, en tanto, le bajó el tono a la polémica que él mismo detonó: aseguró que el PJ bonaerense "debe volver a sus bases" y que el ex presidente Eduardo Duhalde "tiene un horizonte más amplio que preocuparse por la política interna".

También aclaró que, cuando dijo que la primera dama podría ser candidata en un territorio dominado por el aparato duhaldista, en realidad lo hizo "en una conversación coloquial con un periodista", pero que "no fue el lanzamiento de ninguna postulación".

Sobre la relación con Duhalde ante el desembarco del kirchnerismo en Buenos Aires, Kunkel indicó que, "si fuera necesario, nos pondríamos la mayoría de los peronistas de acuerdo en respaldar eso".