| domingo, 28 de diciembre de 2003 | Fuera de foco Claudio Baroni: "No soy un exiliado cultural" El músico explicó por qué trabaja en Holanda desde hace 6 años -¿Cómo empezó tu interés por la música contemporánea?
-En mi casa siempre se escuchó música clásica. Es como una típica familia de intelectuales (risas). Pero cuando era adolescente mi grupo preferido era The Clash, y también me gustaban Television, los Sex Pistols, Nina Hagen, Bob Dylan y Patti Smith. Después, en el Instituto Goethe de Rosario descubrí los discos de Stockhausen y John Cage.
-Vivís en Holanda desde hace seis años y estuviste nueve en Buenos Aires, ¿por qué te fuiste de Rosario?
-Porque en Rosario no hay mercado para la música que hago. Tampoco en Buenos Aires, aunque en este momento hay cierto movimiento. Además a la gente de los pueblos nos gustan las ciudades grandes (risas). De todas formas lo que aprendí lo aprendí acá. Estudié piano con Ana María Cué y Antonio De Raco. En Europa conseguí desarrollar cierta técnica.
-¿Cuáles son tus principales referentes a la hora de componer?
-JohnCage, Morton Feldman, Steve Reich, algo de la escuela americana y otros europeos como Berio y Stockhausen.
-¿Cuál fue tu trabajo en Buenos Aires?
-Estuve con el Ensamble Halloween. Entonces empezaba a trabajar en composición. Lo más importante que hicimos fue un evento con superposición de varias obras de Cage. En el 96 hicimos "Opera estudio del estilo veneciano", con producción del teatro Colón.
-¿Qué te llevó a Amsterdam?
-Tres músicos intrigantes: Louis Andrissen, Klarensz Barlow y Gilius van Bergeijk. Andrissen fue el representante del minimalismo en Europa. El venía de una banda de rock. Incorporó la guitarra eléctrica y el bajo a la sección orquestal. Yo llegué allá a través de becas de la Subsecretaría de Cultura de la Municipalidad, del Mozarteum y de subsidios que conseguí en Holanda.
-¿Cómo es tu trabajo en Holanda?
-Trabajo para ensambles profesionales, que me comisionan obras. Ahora el grupo de percusión Slagwerkgrop Denhaag está grabando una obra mía. Escribo dos o tres obras por año. Hasta el 2006 tengo la agenda completa.
-¿En Amsterdam la música contemporánea es popular o elitista?
-El término "elitista" funciona en Argentina, porque hay muchas diferencias. En todas las sociedades hay tribus, pero en Amsterdam se llenan todos los conciertos, desde uno de Björk hasta otro de música contemporánea. Hay una solvencia económica que permite acceder a ese marco cultural.
-¿Te sentís como un exiliado?
-No, está todo bien con Rosario. No soy un exiliado cultural. Tengo muchos amigos y adoro a Rubén Naranjo, disfruto de las charlas con él. Lo que más extraño es el río. Pero no estoy atado a la idea de vivir siempre en un mismo lugar. También trabajé en Alemania y el año que viene voy a tener una reposición en Inglaterra. El 17 de enero, con Fabián Marcaccio, un artista rosarino que vive en Nueva York, nos vamos a presentar en un festival de música alternativa en Barcelona. Trabajamos en colaboración con instalaciones de sonido y animaciones en video. enviar nota por e-mail | | Fotos | | Baroni aseguró que en Rosario no hay mercado para su música. | | |