| domingo, 28 de diciembre de 2003 | Controlar el tránsito de la ciudad Por intermedio de la gentileza que me brinda La Capital para poder expresar mis inquietudes, me dirijo a las autoridades municipales rogando a Dios para que el año 2004 venga acompañado de un cambio de mentalidad que les haga ver la realidad a quienes tienen a su cargo el control del tránsito. Una gran cantidad de infracciones se comete a diario en nuestra ciudad y muchas son causa de numerosos accidentes, algunos fatales. Ejemplos: altas velocidades a cualquier hora de día o de la noche; circulación de contramano por los lugares más inapropiados; estacionamiento en doble fila, en las escuelas y lugares que mejor le quede al conductor; luces apagadas, donde uno se entera que viene un vehículo cuando lo atropella; chapas patentes ilegibles ex profeso, sucias o colocadas en forma invertidas o semiocultas para hacer más difícil su identificación. Por estos motivos considero que el tiempo pedagógico se agotó -ya que se arrastran más de 50 años de aprendizaje y todavía nadie logró aún rendir los exámenes en forma satisfactoria-, por lo que deduzco que ya deben aplicarse las sanciones correspondientes con sus respectivas multas. Para que éstas no sean tildadas de "recaudadoras" podrían ser destinadas a diferentes instituciones, como el Hogar del Huérfano, Ilar, Hospital de Niños y muchas otras tantas entidades de bien público que necesitan apoyo económico.
Mateo Rolón enviar nota por e-mail | | |