| sábado, 27 de diciembre de 2003 | Rápido asalto a una estación de servicio de Ovidio Lagos al 6300 Un ladrón con ropas policiales robó lo recaudado en tres días de un surtidor Con pantalón de fajina, borceguíes y remera, nadie sospechó de él. Encerró en el baño al dueño y a un empleado Un delincuente que vestía uniforme de la policía provincial asaltó ayer a la mañana la estación de servicios Shell ubicada en Ovidio Lagos y Batlle y Ordóñez, en la zona sur, y se llevó una suma no determinada de dinero. El falso agente llegó a pie y se fue a pie luego de apoderarse de la recaudación de los últimos tres días sin lastimar a nadie. Los responsables del comercio no precisaron a la policía la cifra sustraída: dijeron que para conocerla debían hacer un arqueo.
El atraco sucedió alrededor de las 10 y fue tan sigiloso que muchos en el amplio comercio ubicado sobre Ovidio Lagos, pocos metros antes de Circunvalación, no se dieron cuenta de lo que sucedía. La estación ofrece provisión de naftas y Gas Natural Comprimido (GNC), además cuenta con un vistoso minimarket.
A la hora en que se produjo el golpe estaba en pleno funcionamiento y faltaba poco para que se largara a llover. El asaltante llegó caminando y encaró directamente hacia un sector lateral del edificio, donde se encuentra la administración. Calzaba un pantalón de fajina negro, borceguíes y una remera blanca con el escudo policial sobre el costado izquierdo. Varias personas vieron llegar al uniformado, pero a nadie le llamó la atención. El hombre cruzó toda la playa y al llegar a la puerta de la oficina se cruzó con un empleado que justo salía de allí.
"Directamente lo pechó al playero y lo metió para adentro", contó uno de los socios y titular del comercio, quien prefirió que no aparezca su nombre en el diario. "Adentro había tres o cuatro persona más. Este delincuente sacó una pistola de un bolso beige y negro y comenzó a pedir el dinero. Todavía no completamos el arqueo por eso no sabemos a ciencia cierta cuánto se llevó", comentó el comerciante.
Los empleados fueron encerrados en el baño. El delincuente quiso poner llave a la puerta, pero no pudo y se marchó igual. Testigos dijeron que se fue de la misma forma en que llegó, es decir, a pie. "Imaginate, quién va a sospechar de un policía caminando", razonó el dueño del local. El hombre manifestó a La Capital su sensación de desprotección que vive él y sus empleados en los tres años que lleva el comercio en esa esquina de la zona sur.
"Este año parece más tranquilo que el anterior. Pero desde 2000 a la fecha nos ha pasado de todo, a cualquier hora vienen tipos armados y algún va a pasar una desgracia", se quejó el empresario. "Uno ya no se preocupa por las pérdidas económicas sino porque no le peguen un tiro a un empleado", manifestó.
"Sufrimos un montón de robos y siempre hicimos las denuncias en la policía", sostuvo con la resignación de que despedirá el año con un asalto. Con relación al monto de lo robado, el hombre no pudo precisarlo. "Estamos haciendo un arqueo de caja, pero fue la recaudación de un par de días", dijo. enviar nota por e-mail | | Fotos | | El dueño del comercio dijo que sufrieron "un montón de robos". | | |