| sábado, 13 de diciembre de 2003 | Temen que las cargas desaparecidas sean utilizadas en actos terroristas Alerta nacional ante el robo de poderosos explosivos en Río Negro Los ladrones se apropiaron de 715 kilogramos de elementos que pueden ser devastadores al combinarlos El robo de 715 kilogramos de explosivos de una cantera situada en Río Negro motivó ayer que fueran puestas en alerta nacional las fuerzas de seguridad nacionales y provinciales. Rubén Norry, juez rionegrino, sostuvo que al encarar la investigación "hay que pensar en una hipótesis de máxima" y agregó que "la pesquisa debe encararse previendo que los explosivos pueden ser usados en un atentado terrorista".
También señaló que una de las presunciones que se manejaron vinculaban el robo de explosivos con la intención de hacer volar el paredón de un penal para provocar una fuga de presos.
Norry admitió que aún "no sabemos quiénes son los autores del delito, no sabemos dónde están los elementos robados y no podemos esperar a que ocurran las cosas para después lamentarnos".
El magistrado dijo que "es mejor planificar todo para evitar lo peor y luego ir descartando alternativas". Además, sostuvo que "la población debe estar tranquila porque se trabaja intensamente en todos los aspectos que involucran la seguridad".
Hasta anoche, la Justicia y la policía rionegrina no habían informado sobre avances en la búsqueda de los 715 kilos de explosivos y 130 de mechas y detonadores que en la madrugada del martes último fueron sustraídos de una cantera de yeso ubicada a 24 kilómetros al norte de General Roca.
Riesgoso cargamento Los ladrones se apoderaron de 24 bolsas de 25 kilogramos cada una de negolita, cuatro cajas de 25 kilogramos de gelamón 50 y 7 kilogramos y medio de gelamita 75. Además, los autores del asalto tienen en su poder cinco unidades de retardo Exel, 15 de retardos comunes, 200 metros de mecha lenta, 2.850 metros de cordón detonante y 96 detonadores.
Según explicaron expertos en explosivos, solo una pequeña parte de los artefactos desaparecidos son de alta peligrosidad, mientras que la mayor fracción representaría riesgos si es usada por alguien que no conoce acabadamente la manera de combinarlos.
El juez, por su parte, se inclinó por opinar que "estamos ante la presencia de personas que conocían muy bien lo que hacían porque llegaron al punto exacto, con las herramientas necesarias y sabiendo que ese día la cantera estaba desocupada".
Según voceros de la investigación, Los ladrones cortaron un alambre perimetral y violentaron un candado que les permitió acceder al galpón de madera donde se guardaban los explosivos.
Los dueños de la empresa robada -José Cholino e Hijos- estimaron ayer que el atraco tuvo que producirse el domingo último, "porque fue el único día en el que no se trabajó en la cantera.
Sobre la posibilidad de que los delincuentes llegaran a los polvorines sin ser advertidos por el vigilador, Cholino indicó que "es posible, porque los explosivos y los detonadores estaban lejos de las oficinas". Los dueños de la minera recalcaron que los polvorines están construidos legalmente y cuentan con la protección que se exige para su habilitación. (DYN) enviar nota por e-mail | | Fotos | | La cantera de yeso de la empresa José Cholino. | | |