| lunes, 08 de diciembre de 2003 | Abate deja un superávit en las cuentas municipales cañadenses El funcionario evaluó sus cuatro años de gestión. Reconoció sus falencias y enumeró sus aciertos Carlos Walter Barbarich / La Capital Cañada de Gómez. - "Dejo un barco previsible, orientado y que se puede manejar", afirmó el intendente Amílcar Abate al hacer una evaluación de la gestión de cuatro años que culminará mañana, tras la cual dejará -según anunció- un superávit de 846 mil pesos en el balance de este año. Asimismo, las autoridades mostraron a la prensa el estado del inmueble donde funcionara la jabonería Cañadenzo, que luego de su remodelación albergará diversas dependencias municipales.
Entre los principales logros de su gestión, Abate mencionó el dictado de carreras universitarias de la UNR, la adquisición del inmueble que se recicla en la avenida Alem, construcción de viviendas, obras de iluminación y la aplicación de una política austera que desencadenó en el superávit. "Apliqué algunas medidas antipáticas como el corte de horas extras y la no contratación de personal. Tampoco ejecuté demasiadas obras públicas, pero hay que analizar mi gestión en el marco de una profunda crisis y de una inundación que golpeó a la ciudad", opinó el intendente, quien dejará su cargo en manos de la justicialista Stella Clérici.
La despedida fue también para los secretarios que acompañaron al mandatario en su administración. El titular de Servicios Públicos, José Luis Odasso, destacó el ambicioso plan de iluminación por el cual se colocaron más de 700 luminarias. La responsable de Acción Social, Carina Mozzoni, explicó que se tuvo que poner en marcha una política social de neto corte asistencialista, y precisó que en su oficina se atiende a unos 1.400 grupos familiares por mes.
Emérita Ruchelli, del área de Cultura y Educación, señaló que el 80% de los objetivos que se propusieron fueron cumplidos en el término de los cuatro años, al tiempo que remarcó el trabajo de las escuelas municipales y destacó la interrelación lograda entre las escuelas no formal y formal. La secretaria de Hacienda, Pamela Suárez, mostró gráficos con la evolución de las cuentas públicas y precisó que el incremento del pasivo fue de apenas 100.000 pesos en la gestión Abate.
Abate deja una planta permanente de 380 operarios, casi un 10% menos que la encontró al asumir. "Tuvimos una ardua labor -concluyó- y hay muchas cosas que me hubiesen gustado concretar. Los tiempos que me tocaron vivir me obligaron a priorizar otras necesidades no menos importantes. No obstante, hoy tenemos un municipio que goza de buena salud". enviar nota por e-mail | | Fotos | | Abate repasó su gestión en una conferencia. | | |