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 domingo, 07 de diciembre de 2003

Cruceros
Antártida, entre témpanos
Avistaje de elefantes marinos y pingüinos durante la navegación por las costas del continente blanco

El M/V Ushuaia es el crucero a la Antártida que tiene como capitán a un "ice pilot" (piloto de hielo), un marino con diez expediciones al continente blanco, cuya misión es ofrecer la necesaria seguridad a los cruceristas que se largan a la aventura de navegar por el mar de los hielos y los témpanos.

Construido en 1970 en el astillero American Shipyard Builders, de Ohío, Estados Unidos, el M/V Ushuaia inició el mes pasado el primero de los viajes de diez días de la temporada 2003-2004, que finalizará el 18 de febrero.

Sólo uno de esos viajes es de trece días, y abarca las fiestas de Navidad y Año Nuevo, un periplo que comienza el 21 del actual y culmina el 2 de enero. La novedad es que incluye la visita a la isla de los Estados, cuyo permiso para que los pasajeros desciendan se está gestionando.

Tras partir del puerto de Ushuaia la nave se dirige hacia el canal de Beagle, por el paso Mackinley, pasa cerca del Logos, un barco encallado y luego enfila por el pasaje Drake hacia mar abierto, con los albatros sobrevolando el barco.

Los témpanos aparecen al cruzar la Convergencia Antártica, a los 60 grados de latitud sur, y recién al tercer día se realiza el primer desembarco a bordo de los zodiac del Ushuaia, todos vestidos de intenso naranja, el color de seguridad de alta mar.

La sensación al llegar a la península antártica es la de ser los primeros aventureros en explorar el paisaje helado, rodeado de fiordos y altas montañas.

En las islas Shetland del Sur habitan simpáticos elefantes marinos, adormilados en las playas, y pingüinos de barbijo, de frente amarilla y papúas.

En Caleta Péndulo se puede vivir una de las emociones más intensas de la travesía: nadar en las aguas antárticas, templadas por la caldera de un volcán sumergido.

El Ushuaia transporta 70 pasajeros en 35 cabinas, dispone de un bar y un salón de observación, además de una biblioteca y de una sala para conferencias, videos y lectura.

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Travesía por frías aguas, sólo para aventureros.

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