"Bajaba del tren y dormía en la mesa de la estación"

La Chancha Semprini laburó casi medio siglo en el ferrocarril Belgrano, hizo fletes con un viejo Rastrojero y se dio el lujo de conocer al Gitano Juárez y al Flaco Menotti. "Trabajé en la oficina de la contaduría general desde los 16 años hasta los 61. Me acuerdo de que cuando estaba en Córdoba y en Newell's volvía de jugar en Buenos Aires, me bajaba en la estación Central Córdoba y dormía en una mesa de la oficina", recuerda la Chancha, a quien recién después de varios años le daban algún que otro permiso para faltar. "Cuando el Gitano Juárez dirigió Córdoba, un día vino a ver la práctica el Flaco Menotti y me regaló un par de botines alemanes. Y como las pelotas eran muy viejas vino otro día y nos regaló cinco o seis nuevas", confía Semprini, con esos ojos celestes de gringo del campo.