| domingo, 30 de noviembre de 2003 | Escúcheme doctor Esven Segovia -Doctor, ya no sé qué hacer con esta deformación en la espalda, la gente me grita mochila, Rigoletto, camello...
-No hay como las sierras para eso, amigo...
-Es que la altura me hace mal, doctor...
-¡Ma que altura! ¡Le serrucho la joroba y listo!
*
-Doctor, me pica la garganta...
-Cómase las uñas.
*
-Doctor, esputo...
-¿Cómo lo adivinaste, salvajote?
*
-Doctor, esa dentadura que le hizo a mi esposa es muy defectuosa...
-¿Cómo lo supo?
-Salió en la conversación...
*
-Doctor, ¿se acuerda de mí? Usted me operó de aquel testículo superdesarrollado...-Ajá. ¿Y qué tal anda, mi amigo?
-Ahora me siento mejor...
*
-Doctor, mi mujer me grita constantemente, es insoportable..
-¿A qué lo atribuye?
-¿Cómo dice?
-Digo que a qué lo atribuye.
-¿Cómo dice?
-¡DIGO QUE A QUE LO ATRIBUYE!
-¿Cómo dice?
*
-Doctor, me saqué una muñeca.
-¿En una caída?
-No, en una rifa.
*
-Doctor, tengo colitis.
-Cúbrase con esta frazada.
-¿Y?
-Trate de no destaparse.
*
-Do-do-doctor, soy ta-ta-ta-tartamudo...
-Cho-cho-chocá lo-lo-los ci-ci-cinco...
(selección de varios números de La cebra a lunares) enviar nota por e-mail | | |