Cáncer de mama: Más mujeres se curan por el diagnóstico precoz

Existe una mayor conciencia sobre las ventajas del control mamario periódico

Belén Travesaro / La Capital

La detección temprana del cáncer de mama posibilita la cura de la enfermedad. Por eso es tan importante la consulta periódica al ginecólogo para el control mamario. Si bien aún resta mucho por hacer en tal sentido, la doctora María Cristina Crocco, médica en radiología y miembro de la Asociación de Diagnóstico por Imágenes, detecta mayor conciencia entre las mujeres sobre las ventajas del control temprano. "Muchas llegan a la consulta porque saben de la vivencia de alguna amiga o conocida que tuvo cáncer y se curó gracias a que le encontraron el tumor en forma precoz", dijo.

En el país no existen investigaciones que avalen la percepción de la especialista, sin embargo, estudios efectuados en el Reino Unido y Estados Unidos, corroboraron que la realización de exámenes periódicos con mayor frecuencia (mamografía y control médico), contribuye a disminuir la mortalidad por cáncer de mama en más del 5% durante la última década.

La disminución de los índices de mortalidad también se origina en la existencia de tratamientos menos agresivos y más eficaces. Actualmente requieren de cirugías menos radicales que en épocas anteriores, lo que posibilita una mejor recuperación. Incluso, cuando los tumores son pequeños, se puede evitar la extirpación de toda la glándula.


Sin temores
Tomando en cuenta las altas probabilidades de cura que ofrece la realización del diagnóstico temprano, la doctora Crocco aconseja a las mujeres que no tengan temor cuando se palpan una anomalía y que consulten lo antes posible con su ginecólogo. "A veces el miedo las paraliza y no concurren al médico. La anormalidad puede tener que ver con un proceso benigno, como por ejemplo, un quiste", dijo la profesional. "El quiste es producto de alteraciones hormonales, en general permanece uno o dos meses, y no necesita tratamiento", agregó.

Como los tumores sospechosos en los primeros estadios no duelen, es frecuente que la mujer no repare en ello. El carcinoma mamario comienza a molestar recién en las etapas más avanzadas.

La indicación de los métodos de diagnóstico son diferentes de acuerdo a la edad y la presencia o no de antecedentes familiares. Las recomendaciones generales son las siguientes:

u La mujer asintomática y sin antecedentes familiares de cáncer de mama debe hacerse la primera senografía a los 40 años y repetirla preferentemente cada año.

u Quien tiene antecedentes de carcinoma mamario, en especial en familiares de 1º grado (madre, hija o hermana) debe realizar su primera mamografía a los 35 años.

u Sólo en casos muy especiales la senografía se prescribe en menores de 35.

u En general, la colocación de prótesis mamarias no altera la evaluación de las mamas. En estos casos, se practica la mamografía, la que -según cada paciente- puede ser complementada con la ecografía, y eventualmente la resonancia magnética. Este último estudio posibilita ver la silicona en su totalidad.

Los métodos de diagnóstico fundamentales son la mamografía y la ecografía mamaria, a los que se suman como complementarios, la resonancia magnética y la medicina nuclear de mama. El tipo de estudio debe ser seleccionado por el médico ginecólogo, y dependerá de cada mujer.

Las mujeres deben hacer una mamografía a los 40.