Tres encapuchados asaltaron una panificadora

Los ladrones maniataron al dueño y un empleado, en Guatemala al 1300, y se llevaron dinero y un auto

Tres delincuentes encapuchados asaltaron ayer a la madrugada una panificadora de barrio Belgrano y, tras maniatar al dueño y a un empleado, se llevaron 1.700 pesos que sustrajeron de una caja fuerte, dos computadoras completas, una videograbadora y pertenencias de las víctimas. Para llevarse esos artículos, los hampones decidieron cargarlos en una camioneta Peugeot Boxer del propietario de la firma que hasta ayer a la tarde no había aparecido.

El atraco se produjo alrededor de la 1 de ayer en la firma Ipanco SRL, dedicada a la elaboración de tortas y panes dulces, que está ubicada en Guatemala al 1300, zona oeste de la ciudad. Todo ocurrió cuando el propietario de la planta, Camilo Piatti, y su empleado Hernán Nacarra ingresaron al local que funciona en la planta baja de su domicilio y se encontraron con tres hombres que los encañonaron de inmediato.

Dos de los ladrones tapaban sus rostros con cuelleras y gorras, pero uno tenía la cara descubierta. Los tres estaban armados con pistolas automáticas calibre 9 milímetros. El trío siempre mantuvo una actitud hostil hacia sus víctimas. "Nos decían que no los miráramos a la cara y nos pegaban a la altura de las costillas con patadas y golpes de puño", declaró luego ante la policía Piatti. "En ningún momento dejaron de apuntarnos y amenazarnos", añadió.

Las víctimas no tardaron en comprobar que los maleantes ya habían revuelto toda la casa de la familia, que funciona en la plata alta del inmueble. La secuencia del asalto siguió con los dos hombres conducidos bajo amenaza de muerte hacia una oficina donde se encontraba la caja fuerte del negocio. En ese lugar, con el cañón de una 9 milímetros apoyado sobre la cabeza, Hernán no tuvo más remedio que abrir el cofre. De allí los ladrones sacaron 1.700 pesos en efectivo, una cifra que les pareció escasa.

Por eso interrogaron a las víctimas para saber dónde estaba el resto del dinero. Pero como el dueño del negocio les anunció que era lo único que había decidieron subir a la vivienda y llevarse lo que había a mano. Uno de los maleantes se quedó con Piatti y su empleado, mientras que los otros dos subieron las escaleras. Así juntaron un teléfono celular, dos computadoras completas, un teléfono fijo con identificador de llamada y una videograbadora. Además despojaron de sus objetos personales a ambos.

Todos esos elementos fueron cargados en una Peugeot Boxer color blanca, matrícula BEN 827, propiedad de Piatti, que utilizaron como flete. Mientras tanto, Piatti y Nacarra fueron atados de pies y manos. Según fuentes policiales, hasta ayer a la tarde el vehículo seguía sin aparecer. La investigación del robo está cargo de la seccional 14ª.