| viernes, 14 de noviembre de 2003 | Colombia pone fin a su crisis de gobierno Bogotá. - El presidente colombiano Alvaro Uribe, vivió la más grave crisis de su mandato en un sola semana: tres ministros, el comandante de las fuerzas militares y el director de la policía renunciaron en medio de una tormenta política.
En un mensaje interpretado como un llamado a la calma, Uribe emitió el miércoles una circular en que "solicita a todos los integrantes del gobierno concentrarse a trabajar, a gerenciar, a producir resultados, a laborar con visión macro y dedicación micro o de detalle".
"La circular que expidió el presidente se puede leer como un punto y aparte", confirmó el portavoz presidencial. La oleada de dimisiones comenzó hace exactamente una semana con la renuncia del ministro de Interior y Justicia, Fernando Londoño, considerado el "hombre fuerte del gobierno de Uribe".
Londoño presentó su renuncia 24 horas después de haber causado revuelo en el país tras afirmar, en un acto privado con parlamentarios conservadores, que el presidente se iría de su cargo y anticiparía elecciones en caso de que le retiraran el respaldo político. Esas palabras desataron un escándalo de tal magnitud que el propio Uribe se vio obligado a hacer un desmentido, tras lo que el ministro, que intentó en vano matizar sus declaraciones, decidió dejar el gobierno.
Tan sólo 72 horas después, otra ficha clave del gobierno, la ministra de Defensa, Marta Lucía Ramírez, sorpresivamente renunció, al parecer en medio de serias discrepancias con la cúpula castrense por la administración del gasto militar. Ya para entonces el desconcierto en el país era notorio, principalmente porque Uribe nombró a dos empresarios, Sabas Pretelt y Jorge Uribe, en reemplazo de Londoño y Ramírez, respectivamente, ambos con escasa o casi nula experiencia en la administración pública. La situación se agravó cuando en un solo día, el pasado martes, otros dos funcionarios dimitieron, la ministra del Medio Ambiente, Cecilia Rodríguez, y el director de la Policía Nacional, general Teodoro Campo, éste en medio de una ola de escándalos de corrupción en la institución. (AFP) enviar nota por e-mail | | |