Jacarandaes en el Parque Urquiza

Soy vecino del parque Urquiza. La zona está poblada por jacarandaes, unos más viejos, otros más nuevos, pero repletos de flores violetas. El suelo, tapizado del mismo color, es un espectáculo anual que levanta el ánimo y alegra la vista. Pero si se observa atentamente aparecen huellas profundas de abandono, algo lamentable ya que reitera la falta de atención que observamos por la ciudad toda. Los árboles y las plantas (aun los espacios verdes) carecen de la mínima atención. Más bien son ejemplos negativos en una ciudad que cuenta con diez mil personas como "trabajadores". Las plantas no son atendidas debidamente, si son nuevas carecen de tutores aptos, por ello se deforman y terminan por ser quebradas. A esto le sigue el hecho de estar atacadas y mucho, por claveles del aire, planta parásita que las extermina. Esto se repite en el parque Urquiza y no sólo con los jacarandaes sino con todas las especies. Es responsabilidad del señor intendente, que cuenta con una "institución" especializada, en calle Moreno, pero no sirve de nada, sólo pagar sueldos. Los pobres jacarandaes y demás especies viven desasistidos, lo mismo que todos los espacios verdes de la ciudad. No sé si esta nota servirá de algo, es la única vía que tenemos para demostrar nuestra bronca. Por favor, póngase las pilas, camine, recorra, para eso cobran usted y los demás.

Víctor T. Martínez