| sábado, 08 de noviembre de 2003 | El ministro de Gobierno estuvo ayer en el Palacio Vasallo Carranza aseguró que bajó el nivel de delito contra taxistas Choferes y propietarios no acuerdan qué sistema de seguridad hay que instalar en las unidades "Hemos bajado sensiblemente el porcentaje de delitos o hechos de violencia en contra de los taxistas", aseveró ayer el ministro de Gobierno de la provincia, Carlos Carranza, en el Concejo Municipal. El funcionario fue invitado por la Comisión de Servicios Públicos para debatir la política de seguridad para el sector. En particular, se analizó cuál sistema de alarma se podría instalar en los autos para proteger a los conductores y pasajeros de los asaltos. De la reunión también participaron los choferes y los titulares de taxis, y el jefe de la Policía, Luis Pogliese.
El dirigente del sindicato de peones, Horacio Boix, pidió una solución inmediata al tema de seguridad. "Ya se tendría que haber definido este problema, rogamos a Dios que no pase nada, porque entonces acá la responsabilidad no va a ser del gobierno ni de la policía, sino de los propietarios y de la Municipalidad", acusó Boix.
La polémica se endureció cuando los titulares de los coches dejaron en claro que no tienen ninguna intención de invertir dinero para instalar tecnología o aparatos de alarma. "El gobierno se tiene que hacer responsable, y si nos quieren obligar a comprar un sistema, que nos digan cuál y que también haya subsidios", pidió Mario Cesca, de la Asociación de Titulares de Taxis Independientes (Atti).
El asalto y asesinato del taxista Juan Carlos Aldana, hace dos meses, dejó en evidencia una vez más la vulnerabilidad de los choferes frente a la ola delictiva en Rosario. Así, y de la mano de la protesta de los tacheros, el propio Carranza mantiene desde entonces encuentros periódicos con los dirigentes del sector.
Ayer, el funcionario provincial resaltó el accionar de la fuerza policial. "Teníamos tres o cuatro hechos de violencia o delitos por día que sufrían los taxistas, ahora esa cifra es semanal, por lo que creemos que las políticas que se están implementando dan resultados", afirmó Carranza.
De todos modos, el ministro instó al municipio a que obligue a los taxis y remises a instalar algún sistema de alarma en los coches. "Es una manera de complementar el trabajo de la policía, es poner una barrera más para evitar el delito", acotó.
Los métodos que se evalúan son la implementación de una caja de seguridad con alarma para depositar el dinero, una tarjeta magnética y un sistema de radio satelital conectado directamente con la policía.
A partir de ayer el Concejo Municipal incorporó la problemática a la agenda y se comprometió a revisar la ordenanza que propone al sector optar por algún sistema de seguridad propio. "El mismo lunes lo vamos a plantear en la comisión por que en todo este tiempo (desde que mataron a Aldana) estuvimos ajenos de la discusión", se quejó Analía Carrió, presidenta de la Comisión de Servicios Públicos. enviar nota por e-mail | | Fotos | | Carranza asistió a una comisión del Concejo. | | |