| miércoles, 05 de noviembre de 2003 | Charlas en el Café del Bajo -Aún no asumió y ya metió las de andar.
-¿A qué se refiere, Inocencio?
-¿No leyó las declaraciones del Colegio de Abogados de Rosario a propósito de esta propuesta de Jorge Obeid de designar jueces y policías mediante la consulta previa a entidades intermedias, vecinos, etcétera?
-¿Qué dijeron los abogados?
-Le dieron un coscorrón al Turco. Dicen que "Obeid parece desconocer en sus declaraciones la existencia del Consejo de la Magistratura, nada menos que el órgano asesor del Poder Ejecutivo encargado de elegir una terna de candidatos para cada cargo vacante de juez, previo concurso de antecedentes y oposición, un sistema de reciente data que fue instado por el Colegio de Abogados rosarino y consensuado con otras instituciones vinculadas a la Justicia y el propio gobierno, lo que significó el principio del fin del dedo político en la elección de magistrados en la provincia".
-Sí, la verdad que allí el gobernador electo estuvo desubicado. ¿Lo asesorará alguien? Lástima también que haya anunciado que va a derogar la ley de lemas y al otro día pusieran reparos algunos dirigentes peronistas santafesinos. Bueno, estas cosas ocurren cuando se lanzan al éter palabras para quedar bien con la comunidad, para obtener consenso sin reparar en el andamiaje jurídico y las instituciones que lo sustentan. Antes de hacer cualquier modificación en el sistema de elección de los jueces, el gobernador debería haber anunciado que le daría al Consejo de la Magistratura, un órgano que en la provincia funcionó excelentemente, rango constitucional.
-Y antes de anunciar la derogación de la ley de lemas debería haberse reunido con los legisladores y consensuar la medida, porque si envía el proyecto y se lo rechazan sus compañeros en la Legislatura quedará demostrada su debilidad política. Porque a no engañarse, Jorge Obeid asume con poco poder propio.
-De todas formas parece que el hombre poco a poco va metiendo a su gente y descuartizando las expectativas del reutemismo y de otros sectores con habilidad. A Alberto Hammerly, el delfín del Lole, quien sonaba como ministro de Obras Públicas, parece que se le fueron las ganas de ocupar la cartera.
-¿Por qué?
-Las malas lenguas dicen que se la recortaron tanto que no se sabe si asumiría como ministro o como albañil encargado del mantenimiento de la Casa de Gobierno. En esas condiciones el hombre no quiere agarrar.
-¡Qué malos! Palita, fratacho y baldecito. El Lole merecía algo mejor.
-A propósito. La campaña de desprestigio que hace un tiempo se desató contra la Lotería santafesina y que en Rosario se caracterizó por afiches pidiéndole a Obeid transparencia en esa entidad (y que algunos brujos, que nunca faltan, dicen que son "autoafiches") asustaron tanto al Lole que parece que decidió entregar la lotería a las huestes obeidistas. Cuando alguien muy cercano a Reutemann le reprochó: "¿¡Pero cómo vas a darle la Lotería al Turco?!", el corredor parece que respondió: "Estoy cansado de que digan que a la Lotería la manejo yo".
-Se la hicieron bien al Lole, lo corrieron con una vaina y encima de algodón. Lo que pasa que es temeroso de ciertas cosas y los muchachos que habrían pergeñado la estrategia la pensaron excelentemente.
-Bueno, pero el asunto es que se abre una nueva etapa política en la provincia de Santa Fe.
-Con Mereque a la cabeza.
-¿Quién es Mereque? ¿El Rey del Merengue? Jua, jua, jua.
-Déjelo allí, ni hablemos de ese tema, porque van a decir cualquier cosa los muchachos peronistas. Sabe una cosa, si hay algo que me apena realmente es que el gobernador electo no haya valorado la actuación de ciertos funcionarios como Carlos Carranza, a quien debió dejar en la cartera de Gobierno.
-Lo que sucede es que ya se percibe una orientación política en las filas del nuevo gobierno. Y bue... hay que desearle éxito al ingeniero Obeid.
-Esperemos que algunos muchachos que podrían reeditar su presencia en el gobierno mejoren la performance. Veremos.
Candi II
[email protected] enviar nota por e-mail | | |