 | lunes, 20 de octubre de 2003 | El Papa beatificó a la Madre Teresa como cierre de una semana de festejos Con esta celebración en el Vaticano concluyeron los actos organizados por el 25º aniversario de su pontificado El Papa Juan Pablo II beatificó a la Madre Teresa de Calcuta en una misa celebrada en la plaza de San Pedro del Vaticano en la que el Pontífice pronunció la fórmula que declara beata a la religiosa. "Después de haber pedido el consentimiento de la Congregación para la Causa de los Santos, con nuestra autoridad apostólica acordamos que la venerada sierva de Dios, Teresa de Calcuta, sea llamada de ahora en adelante beata", declaró.
El Pontífice anunció que el día en que se celebre la fiesta de la nueva beata será "el día de su nacimiento en el cielo", es decir el día de su muerte, ocurrida en Calcuta el 5 de septiembre de 1997.
Después de la lectura de la fórmula de beatificación, doce minutos después de iniciada la ceremonia, una muchedumbre de cerca 300 mil devotos, cantó un "amén" y el coro de 400 voces entonó el "Aleluya".
Un gran telón con el rostro sonriente de la nueva beata fue izado en el centro de la basílica, lo cual provocó el fervor de los fieles, que aplaudieron emocionadamente, y numerosas religiosas de la congregación fundada por la religiosa estallaron en un llanto conmovedor cuando el Papa pronunció la fórmula.
Una procesión de jóvenes monjas con el tradicional sari blanco con los bordes de rayas azules caminó hasta el altar para entregarle una reliquia de la nueva religiosa con varias gotas de sangre de la religiosa. Las gotas de sangre fueron sustraídas del cuerpo de Madre Teresa por un médico bajo el control de las autoridades eclesiásticas locales, durante la exhumación exigida para el proceso de beatificación.
La reliquia fue entregada al Pontífice por la hermana Nirmala, la religiosa india que sucedió a Madre Teresa como responsable de las Misioneras de la Caridad. "Personalmente agradezco a esa mujer valiente que sentí siempre cercana. Icono del buen samaritano, viajaba por todo el mundo para servir Cristo a los más pobres entre los pobres. Ni los conflictos ni las guerras la frenaban", dijo el Papa en su homilía, leída casi toda por un prelado de la Curia Romana.
"La Madre Teresa proclamó el Evangelio con su vida, toda dedicada a los pobres y a la oración", afirmó el Pontífice, admirador de la religiosa, a quien recibió varias veces en el Vaticano.
Con la beatificación de Madre Teresa de Calcuta, la 1.315 proclamada por Juan Pablo II, el Papa clausuró simbólicamente los festejos por sus 25 años de pontificado.
Tres mil indigentes y quinientos minusválidos, residentes en las varias residencias de la congregación de las Misioneras de la Caridad, estaban sentados en las primeras filas, al lado del altar.
El proceso de beatificación de nueva beata, premio Nobel de la paz en 1979, fue particularmente rápido, ya que se inició en 1999, tan sólo dos años después de su muerte, en vez de cinco, y se concluyó cuatro años después. En el curso de un cuarto de siglo de Pontificado, Juan Pablo ha proclamado también 476 santos, un récord en la historia de la Iglesia. (AFP) enviar nota por e-mail | | Fotos | | Unos 300 mil fieles participaron de la ceremonia. | | |