La actual ola de calor es sólo un anticipo de lo que vendrá

El verano será un infierno: la térmica superará los 45 grados

Las temperaturas máximas y mínimas serán muy altas. Los expertos dicen que se está tropicalizando el clima

Eugenia Langone / La Capital

Días con temperaturas agobiantes y sensaciones térmicas que superarán los 45 grados calor. Así, casi como un verdadero infierno, promete llegar el verano a Rosario. El climatólogo del Servicio Meteorológico Nacional (SMN), Hugo Hordij, adelantó a La Capital que "la humedad provocará para este verano sensaciones térmicas muy altas en la zona de Rosario". No obstante, descartó que pueda producirse tanto en el país como en el área del Litoral un fenómeno similar al que vivió Europa en el último verano, donde una intensa ola de calor causó la muerte de unas 15 mil personas. "Son fenónemos diferentes, en nuestra zona se está dando una tropicalización del clima", aseguró. Así, el especialista pronosticó que habrá algunos respiros durante la estación estival, ya que se producirán lluvias y tormentas con aire fresco.

Todo indica que la ciudad y su región tendrán que sobrevivir a un verano intenso. Y la ola de calor que sufre la ciudad desde hace unos días con temperaturas que superaron los 34 grados parece ser nada más que un adelanto. "Si esto es octubre, ¿cómo será enero?", es la frase que más se escucha en las calles, mientras la gente busca lugares para refrescarse y ya sueña con las vacaciones.

El especialista del SMN vaticinó para el verano temperaturas superiores a los 37 grados y, como si fuera poco, también adelantó que las sensaciones térmicas también estarán por encima de los 45.

Lo peor es que las noches no serán demasiado refrescantes. "Siempre hay un descenso de la temperatura durante la noche, pero van a ser cálidas porque la humedad hace que la variación entre el día y la noche no sea demasiado amplia", apuntó Hordij.

Y aunque sólo sea un consuelo, este verano no prevé romper con el récord histórico de temperatura que tiene Rosario. Es que durante el último día de diciembre de 1938 se tuvieron que soportar 42,1 grados y peor fue el 6 de enero de 1925 cuando la temperatura alcanzó los 43,5 grados de calor.

Es que el verano es por definición caluroso y así lo indican las temperaturas máximas promedio registradas durante esa estación en la ciudad. E incluso los promedios de temperaturas mínimas son altos. Durante diciembre la temperatura máxima promedio está en los 30 grados y la mínima supera los 17. Ya en enero la máxima media supera los 31 y la mínima es de 18,5. Y recién en febrero comienzan a descender: una máxima promedio de 29 y una mínima de 17,7.


Lluvias refrescantes
Toda la zona del Litoral, incluida Rosario, espera para este verano vientos del este, lo que según el especialista del Servicio Meteorológico significa un aumento de la humedad. "Esto va a provocar precipitaciones y también tormentas, y hasta el registro de lluvias puede estar por encima del promedio para esa zona", vaticinó.

Es que hay dos tipos de masas de aire, según detalló Hordij. Una proviene de la zona del Amazonas y es muy calurosa; y otra es la que llega desde el este con vientos muy húmedos. Y son estos últimos los que van a predominar en la zona de Rosario este verano.

"Estas corrientes de aire son las que van a hacer que después de dos o tres días de calor agobiante haya precipitaciones o tormentas que traerán un poco de aire fresco. Porque es justamente la conjunción de altas temperaturas y aumento de la humedad la que provocará la llegada del agua refrescante", explicó el climatólogo.

Este fenómeno fue bautizado por los especialistas como "tropicalización" del clima. "Significa que aumentan los registro de lluvias por el mismo aumento de la humedad, y esto se debe a factores en gran escala que no afectan sólo a Rosario", señaló Hordij.

Con esto, desterró la idea de que los veranos son cada vez peores y aseguró que "todavía los registro más altos son de varias décadas atrás, cuando era más seco".

Y también descartó que se pueda producir tanto en el país como en la región un fenómeno similar al que se dio durante el último verano en los países europeos, y que sólo en Francia se cobró la vida de más de 11 mil personas.

"Son fenómenos totalmente asimétricos. Acá se produce una tropicalización del clima, con más humedad, lluvias y tormentas. En Europa, en cambio, se dio una africanización del clima, es decir, con olas de calor seco durante días y noches, y sin humedad. Y a eso se sumó un fenómeno que impidió durante semanas enteras la formación de nubes", explicó Hordij.

Se calcula que habrá temperaturas de más de 37º.