| sábado, 18 de octubre de 2003 | Sin amigos para los negocios "Se van revisar los contratos de concesión otorgados por el gobierno menemista, donde no existen obligaciones para las concesionarias. Aquí se terminaron los negocios para los amigos", disparó el asesor legal del ente, Osvaldo Boulán, cuando en agosto pasado los trabajadores se movilizaron hasta la sede del EPVC.
La necesidad de revisión de esa concesión comenzó a tomar forma hace un par de años, a partir de un prolongado enfrentamiento entre el ente y Servicios Portuarios, y esa posibilidad se intensificó desde la asunción del presidente Néstor Kirchner.
Es que desde la mayoría de los sectores ligados a la actividad se abona la sospecha de que la empresa estaría utilizando el puerto villense "como un tapón para otros interesados en hacerlo trabajar". Para quienes así lo denuncian, la empresa beneficiaría de esta manera sus actividades en otros puertos de la zona, entre ellos los de Rosario y San Nicolás.
Sin embargo, desde Servicios Portuarios se han negado esos cargos en repetidas oportunidades. Para la empresa, este planteo es descabellado: "Cómo no vamos a querer que este puerto funcione, si de él dependen cientos de familias además de nuestros propios empleos", sostuvieron directivos locales que hace un par de meses acompañaron la movilización de los trabajadores. enviar nota por e-mail | | |