| sábado, 18 de octubre de 2003 | Argentina y Brasil, con un papel propio en la región Jorge Svartzman Brasilia. - La voluntad de ejercer un papel estabilizador en Sudamérica, diferente al de Estados Unidos -que hizo de la lucha contra el narcotráfico el caballito de batalla en la región- llevó a Brasil y Argentina a enviar una misión a Bolivia, expresaron analistas.
Argentina y Brasil hasta ahora se limitaron a destacar la importancia de defender el orden constitucional en Bolivia, en tanto que Estados Unidos, por boca del jefe de su diplomacia para Latinoamérica, Roger Noriega, tomó la defensa explícita del presidente Gonzalo Sánchez de Lozada, al decir que el mandatario "está defendiendo una democracia de 21 años de edad".
Un ex secretario antidrogas del gobierno brasileño, Walter Maierovitch (en 1999, bajo el gobierno de Fernando Henrique Cardoso), afirmó que Argentina y Brasil tratan de equilibrar la influencia de Estados Unidos, que "siempre insistió mucho en la cuestión de la guerra a las drogas en Colombia y Bolivia. Pero la bandera de la lucha contra el narcotráfico siempre sirvió para defender intereses económicos, políticos y estratégicos", dijo el juez Maierovitch, haciendo notar que Sánchez de Lozada trató de mover esa fibra en Washington cuando acusó a sus adversarios de querer imponer una "narcodictadura".
La droga, problema para Brasil Lo cual no impide que la droga sea "un gran problema para Brasil", mercado para la cocaína boliviana, precisó el magistrado, que actualmente dirige el Instituto Brasileño de Ciencias Criminales Giovanni Falcone, de San Pablo.
Maierovitch opinó que al mismo tiempo, Brasilia y Buenos Aires "necesitan afirmar su presencia en América Latina antes de las negociaciones del Alca", que se efectuará el mes próximo en Miami.
Brasil tiene además en juego los intereses de Petrobrás, la principal empresa de Bolivia con una facturación de 650 millones de dólares anuales, y su propio aprovisionamiento de gas natural (14 millones de metros cúbicos diarios, equivalentes a la mitad del consumo brasileño), señalan los expertos en Brasilia.
"Brasil y Argentina son dos grandes países y estamos llamados a desempeñar un papel decisivo en la construcción de un continente libre, justo y solidario", dijo Lula el jueves en Buenos Aires. La hora de demostrarlo llegó antes de lo previsto. (AFP) enviar nota por e-mail | | |