 | jueves, 16 de octubre de 2003 | Un paso hacia una estación en el Cosmos Boris Cambreleng Pekín. - El vuelo espacial habitado llevado a cabo ayer por China tiene un interés científico limitado en sí, pero podría constituir una etapa hacia la construcción de una estación espacial, lo que tendría importantes repercusiones civiles y militares, estiman los expertos. "Shenzhou V nos remite al tipo de naves espaciales construidas por EEUU y la ex Unión Soviética hace años. Es una copia de Soyuz" (el lanzador ruso), estima David Baker, director de la revista Jane's Space Directory. En su opinión, la mayoría de las misiones científicas son realizadas por satélites. "Los vuelos habitados son muy caros pero no aportan gran cosa en el dominio científico".
China, que lanzó más de 50 satélites en los últimos 30 años, ha realizado incluso experiencias científicas a bordo de los cuatro precedentes vuelos no habitados de su programa espacial Shenzhou, iniciado en 1992. "A partir del momento en que se puso en marcha el programa Shenzhou, los chinos concentraron sus embarques de satélites en esos lanzadores. Shenzhou IV incluyó cinco satélites dedicados a esos experimentos", según Philippe Coué, autor de un libro titulado "Cosmonautas de China".
Coué señala asimismo ciertas diferencias respecto al modelo soviético. "Contrariamente a lo que ocurría con el programa Soyuz, los módulos orbitales de Shenzhou no vuelven a Tierra rápidamente. El de Shenzhou IV cayó en el Pacífico el 9 de septiembre al cabo de nueve meses, cuando la duración máxima de mantenimiento en el espacio es en principio de seis meses".
Versión reducida de la Mir China "pasará muy rápidamente del vuelo habitado a la estación espacial. Lo que los norteamericanos y los rusos tardaron en hacer cinco o seis años, China lo hará mucho más rápidamente", estima, por su parte, Brian Harvey, también autor de un libro sobre el programa espacial chino. "La estación espacial china será una versión reducida de Mir" (la estación rusa destruida en 2001 después de funcionar quince años), agrega Harvey. Al igual que los rusos, los chinos procederán sin duda gradualmente, prolongado poco a poco sus estadías en el espacio.
A diferencia de los simples vuelos habitados, las estaciones espaciales cumplen un papel científico importante. "Sus laboratorios hacen muy buenas observaciones del Sol, y Mir realizó importantes experimentos sobre la ausencia de gravedad", explica.
En razón de sus posibles aplicaciones militares, la presencia china en el espacio empieza a preocupar a EEUU. "A corto plazo, no habrá tensiones, porque EEUU sabe que el programa espacial chino tiene entre diez y quince años de atraso, pero observa de cerca todos sus resultados", considera Arthur Ding, especialista de cuestiones militares chinas del Instituto de Estudios Internacionales de Taiwán. (AFP) enviar nota por e-mail | | |