| miércoles, 15 de octubre de 2003 | Entre dos galancitos y un rockero sensible Gwyneth Paltrow no sólo encontró un equilibrio en su carrera cinematográfica. Cuando el año pasado comenzó su noviazgo con Chris Martin, el cantante del grupo de rock inglés Coldplay, su vida amorosa también encontró cierta estabilidad. Es que Martin está lejos del prototipo de la estrella rockera perseguida por las groupies y los excesos. Todo lo contrario, el rubio es de lo más sensible, políticamente correcto y hasta militante por las causas de los países del Tercer Mundo. Su presencia le sirvió a Paltrow para desprenderse en parte de la frivolidad de Hollywood. No puede decirse lo mismo de sus ex parejas. En 1996 la actriz se comprometió con Brad Pitt, pero la relación se terminó un año más tarde. Su sucesor fue Ben Affleck, otro típico galán de la industria del cine. enviar nota por e-mail | | |