Con facilidad

Boca sigue siendo el mandamás del Apertura

Boca venció fácilmente a Atlético Rafaela por 2-0, como local, y recuperó la soledad en la punta del torneo Apertura que, por unas horas, le había disputado San Lorenzo, al cabo de la novena fecha.

El triunfo, conseguido después de dos empates consecutivos, llegó con dos tantos de Matías Donnet, a los 3 y 19 minutos del segundo tiempo.

Fue la primera victoria que logró el equipo de Bianchi sin la titularidad de Tevez, quien permaneció en el banco y recién ingresó a los 21' del complemento por Iarley.

El conjunto xeneize, que el miércoles jugará un partido pendiente de la 4ª fecha contra Banfield, lidera el torneo con 20 puntos, seguido por Rosario Central (18).

La tarde tuvo tres llamadas de atención: un penal de Schiavi sobre Forestello que el rosarino Sergio Pezzotta obvió sobre el final del primer tiempo y con el marcador en blanco, un error defensivo que pudo haber significado el transitorio empate con un cabezazo de Gabriel Lobos y una mano dudosa de Diego Cagna en la jugada previa del segundo gol.

Comizzo, que jugó un partido aparte con el público local, sostuvo la paridad durante 48 minutos con intervenciones claves.

En el primer tiempo conjuró tres: dos ante arremetidas de Iarley y otra frente a Cagna, quien apareció libre en el área, y le entregó la pelota en su intento de dominarla.

La más clara, sin embargo, la tuvo Franco Cángele, quien capitalizó una falsa salida del arquero, pero falló en la definición desde un ángulo muy cerrado.

Finalmente Matías Donnet, a los 3' del segundo tiempo, estableció la merecida ventaja con un disparo que sucedió a un rebote que entregó el arquero después de un cabezazo del propio jugador.

Boca justificaba el resultado con las proyecciones de sus activos laterales, el equilibrio de Battaglia, la predisposición de Iarley para convertirse en el armador del juego y la frescura de Cángele por derecha.

Donnet amplió la distancia en una jugada que tuvo a su rival sumergido en la protesta por una falta inexistente de Cagna sobre Comizzo, quien quedó tendido en el suelo.

Los dos goles fueron el seguro firmado por Boca para llevarse los tres puntos y los minutos restantes se emplearon para el recambio de algunas piezas y el lucimiento colectivo en algunas jugadas asociadas.

En ese lapso se produjo la reaparición de Carlos Tevez, quien estuvo cerca de anotar el tercero con una electrizante corrida que definió con un derechazo desviado sobre el palo derecho.

Antes del final, Cángele estrelló un remate en el palo cuando Boca disfrutaba los últimos minutos de una tranquila tarde de domingo en la que se libró de malas compañías en lo más alto.

De regreso. Tevez entró en el segundo tiempo.