| lunes, 13 de octubre de 2003 | Amor-odio entre Europa y EEUU El discurso de Sontag al recibir el premio alemán se centró en las relaciones entre Estados Unidos y Europa, "el amor-odio, las coincidencias y enfrentamientos", entre ambos lados, en un conflicto que comparó como el que existe entre jóvenes y adultos, en el que se creen encontrar contradicciones fundamentales como entre "civilización y barbarie, entre militaristas y pacifistas, modernos y antiguos, profundos o superficiales, culturales o comerciales".
Como ejemplo de esta dicotomía, Sontag volvió a recordar el intento de la administración Bush de separar a los países europeos a raíz de la guerra en Irak, "entre la Europa antigua y la moderna, el que está con nosotros es nuevo, los otros son obsoletos".
"Los norteamericanos se acostumbraron a ver el mundo como una constante amenaza de lo desconocido, que lo malo acecha desde fuera, la guerra por lo bueno no termina nunca y por eso nunca habrá un fin de la opción militar", advirtió la pensadora.
A su turno, el dramaturgo y crítico literario alemán Ivan Nagel destacó la incomodidad intelectual de Sontag, que "no se deja encasillar en posiciones férreas", destacando su compromiso contra las guerras, pero al mismo tiempo sus críticas contra aquellos que temen tomar las armas para poner fin a genocidios. "Ella, que estuvo en Vietnam, en Palestina, en Israel, en Bosnia, tiene el derecho de decir que el mundo se divide entre los que conocen y aquellos que no conocen la guerra", dijo Nagel, agregando la reflexión que "aquellos que van ganando el poder en ejércitos y consorcios que dominan el mundo no conocen la guerra sino sólo a través de desfiles y programas de computación".
El temor de personas como Sontag, dijo el intelectual alemán, es que "el todavía democrático Occidente está dispuesto a lograr sus objetivos a través de la guerra y para ello incluso las inventa". enviar nota por e-mail | | |