| domingo, 12 de octubre de 2003 | China lanza su primer vuelo espacial tripulado en busca de prestigio Mientras se inicia la cuenta regresiva,el PCCH debate reformas sociales Pekín. - Dos acontecimientos en los próximos días definirán la imagen internacional de China por muchos años en el futuro: la nación intentará poner un hombre en el espacio por primera vez, mientras los dirigentes comunistas sostienen una importante reunión para reformar la economía y la misma Constitución china.
Con la cuenta regresiva andando hacia un lanzamiento entre el miércoles y el viernes próximos para la primera misión espacial tripulada de China, tanto el evento terrestre como el extraterrestre se disputan el espacio de los titulares.
Pero el lanzamiento espacial acaparó los principales titulares en el Diario de la Juventud de Pekín, que anunció: "El primer vuelo al espacio tripulado de la nación despegará la próxima semana". Debajo había una fotografía de un muñeco en un traje espacial que voló en la nave Shenzhou III, la cual aterrizó en abril de 2002 en Mongolia después de un vuelo exitoso.
China aspira a convertirse en el tercer país después de la desaparecida Unión Soviética y Estados Unidos que lanza una nave espacial tripulada, la Shenzhou V. Un vuelo exitoso podría alentar una oleada nacionalista en un país que da sus primeros pasos en el escenario mundial con una diplomacia más activa, la obtención de la sede de las Olimpiadas del 2008 y un auge económico que es la envidia del resto del mundo.
Un fracaso sería un golpe para el orgullo nacional y sacaría a relucir los múltiples problemas del país, desde disturbios de obreros despedidos y agricultores descontentos hasta una brecha en aumento entre los ricos y los pobres.
Debate secreto Mientras corre la cuenta regresiva en la base espacial, el líder del Partido Comunista, Hu Jintao, preside el pleno de cuatro días en reuniones a puerta cerrada para confrontar esos asuntos y considerar enmiendas constitucionales. Una podría ser ofrecer protección para la propiedad privada. A su vez, la brecha entre ricos y pobres de China se está perfilando como una amenaza al orden social tras 25 años de reformas pro mercado.
Los dirigentes también podrían ampliar la protección a la propiedad privada en la primera enmienda a la Constitución de China en cuatro años, pero pocos esperan grandes cambios. Otra enmienda posible podría reconocer la libertad de movimiento de las personas, en un país donde unos 100 millones de campesinos emigran a las ciudades en busca de trabajo.
Pero "los asuntos más delicados, como elecciones multipartidarias y democracia en las filas del partido, probablemente serán aplazadas por ahora", advirtió un abogado asesor de los dirigentes chinos en materia de reformas legales. (Reuters) enviar nota por e-mail | | Fotos | | Vista satelital de la base de lanzamiento china. | | |