| sábado, 04 de octubre de 2003 | El ordenamiento anglicano de sacerdotes homosexuales El cardenal Walter Kasper se congratuló ayer por la primera visita al Vaticano del arzobispo de Canterbury, Rowan Williams, aunque no ocultó la preocupación de la Santa Sede por el ordenamiento de sacerdotes homosexuales en la Iglesia Anglicana. En una entrevista en Radio Vaticano, monseñor Kasper, presidente del Consejo Pontificio para la promoción de la unidad de los cristianos, afirmó que esa visita, durante la cual el arzobispo será recibido hoy en audiencia por el Papa, era un "gesto de un gran significado para el diálogo ecuménico".
"Hemos hablado de todos los problemas que afectan al ecumenismo, de nuestras relaciones con los ortodoxos, los luteranos y sobre todo de la comunión anglicana", explicó monseñor Kasper.
"Pero también hemos abordado los conflictos y las tensiones que han aparecido durante los últimos meses en el interior de la comunión anglicana con el ordenamiento de sacerdotes abiertamente homosexuales", agregó.
"Sobre este tema, manifesté mi preocupación porque no es un problema interno de la comunión anglicana sino que también afecta a nuestras relaciones", dijo el cardenal.
El nombramiento de un obispo abiertamente homosexual en la Iglesia Episcopal, rama estadounidense de la Iglesia Anglicana, en agosto pasado, causó un gran revuelo e incluso amenazas de cisma por parte de ciertas corrientes y provincias. La Iglesia Católica se opone a ordenar sacerdotes homosexuales. enviar nota por e-mail | | |