 | | lunes, 29 de septiembre de 2003 | Traferri pide celeridad en la causa por el cementerio Preocupa la demora del equipo de antropología forense para empezar a trabajar en la necrópolis sanlorencina Marcelo Abram / La Capital San Lorenzo.- La Municipalidad de esta ciudad expuso ante el juez federal Omar Digerónimo y el secretario Guillermo Toledo su preocupación por la marcha de la causa caratulada "Averiguación de la verdad histórica" ante la demora que experimenta, por razones de trabajo, el Equipo Argentino de Antropología Forense que aún no comenzó con su tarea en el cementerio local. El intendente Armando Traferri concurrió a los Tribunales Federales de Rosario para exponer al juez su preocupación y ratificarle su ofrecimiento de colaboración con maquinaria para excavaciones que faciliten la investigación.
La semana pasada, la Municipalidad expuso por escrito su inquietud ante las versiones que indicaban que la investigación de la posible existencia de una fosa común en la que se habrían arrojado cadáveres de desaparecidos durante la dictadura podría demorarse un año y medio como consecuencia de tareas que el equipo de forenses desarrolla en Córdoba.
Traferri fue al juzgado acompañado por Marcelo Remondino, uno de los actores civiles en la causa, y Mariela Riquelme, hija de unos de los desaparecidos sanlorencinos. El intendente planteó al juez la necesidad de buscar alternativas para suplir la tarea de los forenses. Por ejemplo, propuso requerir la intervención de equipos de antropólogos de la universidad y de especialistas que dependen del Museo de Historia Regional de San Lorenzo.
Subrayó que la demora prolonga la incertidumbre sobre el secreto que encierra la necrópolis sanlorencina, que además choca con la necesidad que enfrenta el municipio al tener dos inhumaciones diarias de indigentes que tornan imperioso poder disponer del predio, actualmente preservado por orden judicial.
Más allá de los planteos del municipio, el encuentro tuvo un momento especialmente emotivo cuando Mariela Riquelme contó su triste recuerdo de aquella noche en la que con sólo seis años fue testigo de cómo se llevaban a su padre. "Todavía me acuerdo que alcancé a ver por una ventana cómo le pegaban a mi papá mientras se lo llevaban. Por eso quiero y necesito saber si está allí para poder ponerle una flor, y si otras personas en la misma situación que yo pueden encontrar la paz", afirmó.
La causa se inició el pasado 10 de diciembre con una denuncia en el juzgado de Digerónimo que aludía a un hecho ocurrido en el cementerio de San Lorenzo en el invierno de 1976, cuando una mujer que se encontraba visitando la tumba de un familiar observó a hombres con uniformes militares arrojando bolsas de gran tamaño en una fosa, en el ala noreste de la necrópolis. Se inició la tramitación de una causa, declararon testigos, se ordenó la excavación del lugar y se designó al Equipo Argentino de Antropología Forense para realizar los estudios correspondientes si aparecen restos humanos. enviar nota por e-mail | | |