 | lunes, 29 de septiembre de 2003 | El perro robado Domingo 21. Hora 13. Juan Cruz y Milagros empiezan a llorar y aún hoy lo siguen haciendo. Tienen 3 y 5 años, respectivamente. Hasta que les robaron a su perro, sabían sonreír. Ahora están muy tristes y es comprensible. Son sólo dos niños muy pequeños. Necesitan de Snoopy, su perro, para seguir siendo chicos. Snoopy salió a la calle y se lo robaron. Vivía en Nahuel Huapi 4591 B, esquina Winter (barrio Acindar). El perro, de Juan Cruz y Milagros, es manso. Tan bueno y manso es que los niños no paran de llorar por su ausencia; una ausencia difícil de reemplazar. Ningún chico canjea su perro por un juguete. Snoopy es de color blanco, es un caniche mediano de pelo ondulado. Y es, por sobre todo, como un hermanito más para Juan Cruz y Milagros. Snoopy llevaba, al momento que "desapareció", un collar verde con su dirección y teléfono; quien se llevó al perro tiene que haber visto estos datos. Salvo, claro está, que esté ciego o sea declaradamente un "chorito barato". Alguien debe haberlo visto, alguien debe verlo. Alguien debe saber algo de él o cree saber donde se encuentra. Snoopy espera a Juan Cruz y Milagros, tanto como los chicos esperan a Snoopy. El 4651045 es el número al que Juan Cruz y Milagros esperan que usted los llame. Los dos quieren invitarlo, si usted los ayuda a encontrar a su perro, a jugar juntos. Los niños no saben de maldades y traiciones humanas. Por eso, y precisamente por eso, es que son niños.
Daniel Marocco enviar nota por e-mail | | |