| domingo, 28 de septiembre de 2003 | El Papa reanudó ayer sus actividades oficiales Recibió a la presidenta de Filipinas, Gloria Arroyo, y asistió a la misa en honor a sus dos antecesores El Papa Juan Pablo II reanudó ayer sus actividades después de los problemas intestinales que le aquejaron a principios de semana y recibió en audiencia a la presidenta de Filipinas, Gloria Arroyo, antes de celebrar una misa en memoria de sus predecesores Pablo VI y Juan Pablo I, fallecidos hace 25 años. La audiencia en la que recibió a Arroyo a última hora de la mañana duró unos diez minutos. El Santo Padre recibió a su invitada en pie delante de su sillón, sostenido por su secretario personal, monseñor Stanislaw Dziwisz, y por otro prelado.
Tras la audiencia privada, Juan Pablo II fue a saludar a las personalidades que acompañaban a la presidenta de Filipinas, entre las que se encontraba su esposo que llevaba en brazos a su hijo de pocos meses. El Papa acarició y bendijo con ternura al pequeño.
Pálido, hablando muy poco, el Santo Padre prácticamente se limitaba a gesticular. A última hora de la tarde, hizo su primera aparición pública desde el pasado domingo para presidir en la basílica de San Pedro la misa en honor de sus dos antecesores, que ofició el decano del colegio de cardenales, Joseph Ratzinger, y pronunciar la homilía.
Muy debilitado tras el duro viaje a Eslovaquia que hizo del 11 al 14 de septiembre, el Papa fue víctima el martes de problemas intestinales y tuvo que anular la audiencia general de los miércoles.
Para acallar las especulaciones y los rumores que lo dan por moribundo, Juan Pablo II intervino en directo en la radio durante la audiencia y el Vaticano dio a los canales de televisión imágenes de su intervención. El Papa apareció muy pálido y, al finalizar su bendición, dio un largo suspiro como si quisiera recuperar la respiración.
Su presencia ayer a la tarde en la misa en memoria de sus dos predecesores, muertos en 1978 con unos meses de diferencia, es una forma de mostrar que piensa seguir ejerciendo su mandato hasta el final pese al sufrimiento que padece.
Los prelados del entorno del pontífice no quisieron comentar las informaciones de prensa según las cuales Juan Pablo II debería anunciar hoy un consistorio para nombrar nuevos cardenales, incluido monseñor Dziwisz, lo que sería una decisión sin precedentes en la historia de la Iglesia.
Dziwisz, de 64 años, está considerado como uno de los hombres más poderosos del Vaticano, pues él solo decide qué visitas recibirá el Papa.
El Santo Padre dará a conocer hoy los nombres de los nuevos cardenales que ha designado. Fuentes vaticanas precisaron que serán entre 20 y 30 los nuevos purpurados, muchos de los cuales proceden de Latinoamérica, Africa y Asia, por lo que la proporción de los votos se inclinará en dirección al llamado tercer mundo. Sin embargo, también hay italianos y religiosos de Norteamérica.
Por otro lado, se cuenta con el nombramiento de entre seis a nueve religiosos italianos, lo que elevaría el número de electores de este país de 22 a 25, un número mayor que cualquier otra nación. Por ello, los italianos seguirán teniendo un papel decisivo en la elección del próximo Pontífice. Hasta la elección de Juan Pablo II en octubre de 1978, todos los Papas habían sido italianos durante 450 años. (DPA y AFP) enviar nota por e-mail | | Fotos | | Juan Pablo II, reapareció ayer en el Vaticano. | | |