 | lunes, 22 de septiembre de 2003 | Los acreedores rechazan la propuesta argentina Los acreedores privados han recibido hoy de forma negativa la propuesta de reestructuración de la deuda de Argentina, que afecta a un 53 por ciento de las obligaciones del país e incluye una pérdida del valor presente de los bonos del 75 por ciento.
El ministro de Economía, Roberto Lavagna, afirmó que la quita del 75 por ciento es un "punto focal sobre lo que se construye el resto de la propuesta y no admitirá modificaciones".
Al término de la intervención de Lavagna, la respuesta de los representantes de los inversores en Argentina en la reunión era unánime: "Tal y como está, la propuesta es inaceptable".
Nicola Stock, presidente de la "Task Force Argentina", una asociación que representa al 90 por ciento de los inversores italianos -uno de los principales grupos de acreedores-, declaró que "la cifra del 75 por ciento, hoy por hoy, es inaceptable".
Sin embargo, expresó su opinión de que esa cifra "es lo que el gobierno argentino ha querido decir y todo se podrá negociar" en buenos términos.
Stefan Engelsberger, presidente de IGA, una asociación de tenedores de bonos argentinos en Alemania, calificó el anuncio del gobierno argentino como "poco realista" y expresó su "firmeza para mantener nuestras demandas legales y nuestros derechos".
En Estados Unidos, la acogida no ha sido mucho mejor: Lacy Gallagher, del banco Credit Suisse First Boston, consideró la oferta bastante "negativa", aunque añadió que "se trata en general de lo que esperábamos".
Según Gallagher, la quita puede ser superior al 75 por ciento: "Entendemos que esta cifra alude sólo al valor nominal de los bonos", pero si se le añaden los intereses que se dejan de pagar "puede superar el 80 por ciento".
Jaime Valdivia, de la firma Emerging Sovereign Group, apuntó que la del 75 por ciento es una "quita sustancial" pero algo que ya esperaba el mercado, y agregó que será necesario esperar a ver cuál es el tipo de interés que ofrece Argentina en el canje de bonos.
Sin embargo, dio por supuesto que la propuesta del gobierno argentino de devolver sólo el 25 por ciento de lo adeudado iba a poderse negociar con los acreedores.
Stock, cuyos representados han invertido unos 13.000 millones de euros en bonos argentinos, se reunirá con los representantes del gobierno italiano este martes, en Dubai con vistas a presentar una contrapropuesta a principios de octubre.
Este representante de los acreedores calcula que se puede llegar a un acuerdo para marzo o abril del año próximo.
Los bonos tendrán una variante que permitirá la indexación al crecimiento del PBI argentino, de forma que con mayor crecimiento recibirán mayor interés variable y tendrán una tasa de interés fijo más baja. No obstante, el representante italiano descartó esta opción al afirmar que "es jugar a la lotería".
La deuda pública se encuentra, en un 38,4 por ciento, en manos argentinas, mientras que los tenedores de bonos italianos poseen un 15,6 por ciento; un 10,3 por ciento está en manos suizas, un 9,1 por ciento está en Estados Unidos, un 5,1 por ciento en Alemania y un 3,1 por ciento en poder de japoneses.
Ese reparto involucra a miles de pequeños y medianos ahorristas, atraídos por tasas superiores a cualquier otra inversión a su alcance, que adquirieron bonos emitidos en catorce monedas, antes de la creación del euro.
En cuanto a la distribución por tipo de tenedor, el 56,5 por ciento corresponde a inversores institucionales y el 43,5 por ciento a minoristas. (EFE-DYN) enviar nota por e-mail | | |