 | lunes, 22 de septiembre de 2003 | Ya se pidió a un artista la creación de una obra alusiva Quieren un monumento por los obreros muertos en el puente La iniciativa busca recordar a las víctimas pero además reivindicar los derechos del gremio de la construcción Desde que el ex presidente Carlos Menem colocó en 1997 la piedra fundamental del puente Rosario-Victoria hasta que la mole de cemento se impuso a la vista de rosarinos y entrerrianos, tres obreros perdieron la vida en accidentes de trabajo. Ahora sus pares quieren que la empresa Puentes del Litoral les permita colocar en la conexión un monolito en homenaje a las víctimas de accidentes de trabajo para así también "reivindicar los derechos de los trabajadores de la construcción". La propuesta será oficializada hoy, en un acto en Costa Alta, donde se mostrará parte del monolito que quieren instalar en recuerdo de sus compañeros.
Los impulsores de la propuesta, que desde hace meses está en manos de Puentes del Litoral a través de tres petitorios, son los obreros del Proyecto Manos a la Obra -una bolsa de trabajo creada en marzo del año pasado y que convoca a más de 2 mil personas-. Narciso Canteros preside esta propuesta y aseguró a La Capital que "recordar a estos obreros es crucial porque ellos también fueron parte de la obra más importante de las últimas décadas".
Hoy, los integrantes del proyecto harán la presentación oficial de su propuesta en el muelle de Costa Alta. "Ya tenemos hecha parte del monolito que queremos instalar y la presentaremos allí para que la gente sepa lo que queremos hacer. Además, estarán presentes los familiares de los obreros fallecidos", explicó Canteros.
La idea, según apuntaron, es construir un monolito de un metro de altura donde se emplace un brazo alzado que en el puño sostenga una pala y con una placa que recuerde a los tres obreros.
Pero para el impulsor de la iniciativa, el homenaje es también "una forma simbólica de que se comiencen a reconocer los derechos de los trabajadores de la construcción, que son derechos que nadie respeta. Las medidas de seguridad no se cumplen y no tenemos estabilidad laboral".
Las víctimas El primer accidente en la construcción del puente Rosario-Victoria se produjo el 22 de septiembre del 99, cuando Enrique Luis Bauer murió aplastado por dos vigas metálicas de más de tres toneladas. El soldador de 53 años se encargaba de desarmar paquetes de vigas reticuladas.
El caso disparó el reclamo de mayores medidas de seguridad en la obra. Es más, los operarios paralizaron por casi dos días los trabajos en el puente y recién volvieron a sus tareas cuando la empresa les garantizó que cumpliría con su pedido.
Pero un mes más tarde la historia se repitió al morir un obrero atropellado por una máquina en el obrador de Victoria.
La tercera víctima fatal fue Gustavo Espineti, un victoriense padre de seis hijos, que trabajaba para la firma subcontratista encargada de regar el suelo de los terraplenes sobre los que hoy se asienta la traza. Por un desperfecto mecánico, Espineti debió sacar una rueda de un tanque y la apoyó sobre una pala mecánica. Al pasar un camión la estructura vibró, el tanque se desplazó de su apoyo y cayó sobre el hombre que murió en el acto.
Durante los seis años de trabajo tampoco faltaron los accidentes en los que los operarios resultaron heridos. En diciembre de 1999, una manguera neumática golpeó en el rostro y el tórax a Marcelo Delgado. Y a Hernán Otero, de 24 años, una cinta transportadora le amputó un brazo, que luego le fue reimplantado en una intervención quirúrgica.
Para Canteros, "todos los accidentes se podrían haber evitado. Pero la falta de medidas de seguridad no es algo que suceda sólo en los trabajos del puente a Victoria. En cualquier obra donde se maniobra con una máquina, el área debe estar delimitada con una cinta para evitar que la gente pase por allí, y eso nunca se hace".
Canteros recordó que "el rubro de la construcción tiene los índices más altos de accidentes de trabajo, que terminan con heridos leves, graves y también muertos".
Es por eso que para los compañeros de las tres personas fallecidas el homenaje es también una forma de reivindicarse. "Si fuera por algunos, vamos a terminar trabajando por el plato de comida -se quejó Canteros-. No puede ser así porque estamos hablando de vidas humanas que están en juego". enviar nota por e-mail | | Fotos |  | Una parte del monumento ya está lista. | | |