Centinela de piedra y madera

Bariloche: El refugio Lynch del cerro Catedral celebra 60 años

Hoy funciona como restaurante

El refugio de montaña y restaurante Antonio M. Lynch, en el cerro Catedral, cuyo emplazamiento tuvo estrecha relación con el desarrollo del centro de deportes invernales de Bariloche, está celebrando su 60º aniversario.

El refugio fue construido por Parques Nacionales entre 1939 y 1943, en la cima norte del cerro Catedral. Un mirador natural que permite apreciar al lago Nahuel Huapi casi completo, las principales montañas de la región, en Chile y Argentina, y buena parte de la meseta patagónica rionegrina. Comenzó a construirse luego de que en 1938 Antonio Lynch (uno de los directores de Parques Nacionales) definiera que el Catedral era el cerro más indicado de la zona para emplazar un centro de esquí.

Antes de construir la obra en la cima, unos 200 operarios de la empresa Cristiani y Niels (ganadora de una licitación internacional) debieron montar un cable carril transportador para llevar hasta el lugar los materiales necesarios.

La misma estructura de piedra y madera que hoy se aprecia en una de las construcciones más lindas del Catedral se conserva casi intacta, y lo único que cambió fue el techo, arrancado en un par de oportunidades (1946 y 1948) por los fuertes vientos que con frecuencia soplan en la cordillera. El refugio abrió sus puertas como albergue de montaña y fue administrado en primer término por el propio Lynch. Luego pasó a manos del hotel Plaza de Buenos Aires, cambiando de concesionario hasta la actual administración de la familia de Ernesto Schilling.

Hoy funciona sólo como restaurante, tanto para esquiadores como para peatones que llegan al lugar mediante el cable carril de pasajeros, y desde hace varios años avanza lentamente el proyecto de recuperarlo como alojamiento de montaña, aunque ahora sería de lujo.


Funicular en el cerro Otto
Un funicular, que recorrerá 300 metros entre su lugar de salida y las pistas de trineo y esquí y trasladará a 200 personas por hora, será construido en el cerro Otto de Bariloche, para la próxima temporada invernal. La Fundación Sara María Furman, que maneja el teleférico, anunció la construcción. El primer funicular del país recorrerá unos 300 metros entre la salida, donde hay una confitería giratoria, y la pista de trineos y esquí.

La nueva estructura será inaugurada antes del próximo invierno y consistirá en dos vehículos tipo vagones, uno que sube y otro que baja, traccionados por un cable, que circularán sobre vías de caños de acero. Transportará unos 200 pasajeros por hora y su inauguración estará acompañada por la puesta en marcha de un cañón para fabricar nieve y una máquina pisanieves para acondicionar las pistas.