| domingo, 21 de septiembre de 2003 | Cuba "congela" el diálogo con Europa Marie Sanz La Habana. - Los cooperantes hacen sus maletas y los embajadores permanecen ociosos: el diferendo entre Cuba y la Unión Europea con anulación de programas de cooperación y marginación de los diplomáticos europeos, ha dado lugar a una "guerra de trincheras" de la cual nadie osa predecir sus consecuencias. "Estamos ante un callejón sin salida, ya que ni Fidel Castro ni la UE pueden modificar sus posiciones sin tener que ceder", comentó en forma sombría un diplomático, que estima que "esto puede durar años".
Cuba decidió el mes pasado rechazar toda ayuda humanitaria procedente de la Unión Europea y de sus países miembros, luego de las sanciones diplomáticas adoptadas por los Quince en represalia por el arresto de 75 disidentes y la ejecución sumaria de tres jóvenes que intentaron secuestrar una embarcación para emigrar a EEUU. "Desde un pedido de visa hasta la discusión de un proyecto de desarrollo, no se pueden hacer sin un contacto bilateral directo", se lamentó Sven Kühn von Burgsdorff, representante de la Comisión Europea en Cuba, quien asumió sus funciones unos días antes de la mayor ola represiva contra la disidencia de los últimos años. "Los intereses de la UE se conciben en una perspectiva a largo plazo y pese a que la coyuntura actual no es muy favorable para poner en práctica nuestra política de compromiso constructivo, ello no cuestiona la utilidad de contar con una presencia permanente aquí", explicó.
Pero seis meses después de la apertura con gran pompa de la delegación de la UE en La Habana, en presencia del comisario europeo Poul Nielson y varios ministros cubanos, anunciada como el comienzo de "una nueva era", el restablecimiento del diálogo político con la isla comunista está suspendido por tiempo indeterminado. El presidente cubano Fidel Castro, como lo ha hecho nuevamente esta semana, no pierde ninguna ocasión para fustigar a la "pretenciosa Europa", a quien ha puesto en el mismo saco que a su enemigo ideológico estadounidense. "Bloqueado nuestro país por la única superpotencia y casi bloqueado por Europa, ambas juntas, no podrán derrotar a la revolución cubana", dijo el mandatario en un discurso al inaugurar el ciclo lectivo escolar.
La decisión de la UE de invitar a las recepciones ofrecidas en sus embajadas en ocasión de las fiestas nacionales a los disidentes -calificados oficialmente como "mercenarios locales del gobierno estadounidense"- irritó especialmente al gobierno cubano y desató las hostilidades entre ambas partes.
Los diplomáticos europeos están sometidos al ostracismo oficial y ciertos embajadores ya designados por sus gobiernos, entre los cuales el representante de Francia, esperan desde hace varias semanas el documento de acuerdo del gobierno cubano para instalarse en la isla.
La UE es el primer socio comercial de Cuba y representó en 2002 al 34% de sus intercambios con el exterior. Es además el primer inversor extranjero y el primer emisor de turistas, con más de 800.000 visitantes por año sobre un total de 1,7 millón de visitantes el año pasado. (AFP) enviar nota por e-mail | | |