| miércoles, 17 de septiembre de 2003 | La Cámara de Casación falló contra la extracción compulsiva de sangre En un fallo originado en la búsqueda de identidad de hijos de desaparecidos, la Cámara Nacional de Casación Penal sostuvo que una persona mayor de edad no puede ser obligada a someterse a una extracción de sangre para un examen genético.
De acuerdo al fallo de la Sala IV del máximo tribunal de la órbita criminal, un individuo adulto es "amo y señor sobre su intimidad" y, por lo tanto, quien aparece como víctima de un delito, como la apropiación ilegal de menores, no puede ser objeto de una extracción de sangre compulsiva para determinar su origen.
Con este fallo, los camaristas Ana Capolupo, Gustavo Hornos y Amerlia Berraz de Vidal anularon fallos de primera y segunda instancia federal que habían ordenado la pericia genética para determinar si Carlos Hugo Ferettón es hijo de desaparecidos.
La causa penal la impulsó Germán Stritzler, quien se presentó como querellante en su condición de abuelo -de parte materna- en la denuncia promovida por la agrupación Abuelas de Plaza de Mayo.
En noviembre de 2001 la Cámara Federal de San Martín, ratificando una decisión tomada en primera instancia por el juez Roberto Marquevich, ordenó que se proceda a la extracción de muestras sanguíneas de Ferettón, de 26 años, cuyos presuntos padres biológicos son Carlos Castro y Susana Stritzler, ambos secuestrados en 1976.
Pero el joven apeló esa resolución a la que calificó como una "medida intrusiva" por violar sus derechos esenciales a la intimidad, a la integridad corporal, psíquica y moral, a la dignidad y a conocer la identidad de origen.
La Sala IV dijo que "los derechos individuales tienen aptitud para limitar aún la persecución de objetivos sociales colectivos" y citó fallos que otorgan al individuo "un ambito de libertad en el cual éste puede adoptar libremente las decisiones fundamentales acerca de su persona, sin interferencia alguna por parte del Estado". (Télam)
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