La banda alemana se presenta mañana en el teatro Broadway

Helloween: "Estamos orgullosos de pertenecer a la vieja escuela del heavy metal"

El bajista del legendario grupo, Markus Grosskopf, dijo que la gente los reconoce por su estilo inconfundible

Carolina Taffoni / La Capital

Helloween ya es una especie de banda de culto en la Argentina. Pero no se trata de un grupo salido de un sótano de Nueva York o de algún barrio exótico de Londres. Helloween viene de Alemania, tiene 20 años de carrera y creó todo un estilo dentro del heavy metal europeo, marcado por sus letras fantasiosas y un rock trepidante pero también melódico. Con estas credenciales, los alemanes llegan por primera vez a Rosario para tocar mañana, a las 21, en el teatro Broadway, San Lorenzo 1223.

El grupo, que está presentando su nuevo disco, "Rabbit Don't Come Easy", comienza en Sudamérica una gira mundial que durará seis meses. Su más reciente formación está integrada por Andreas Deris (voz), Markus Grosskopf (bajo), Michael Weikath y Sascha Gerstner (guitarras) y Stefan Schwarzmann (batería). Desde Alemania, en charla con La Capital, Markus Grosskopf explicó cómo la banda sobrevivió durante dos décadas y aseguró: "La gente puede identificar una canción nuestra sin confundirla con ninguna otra".

-¿Cómo será el show en Rosario?

-Como es la primera vez que tocamos vamos a hacer un montón de canciones viejas, más un par de las nuevas. Es un show de dos horas. No podemos llevar un gran escenario, pero tenemos un set básico y dejamos que la música hable por nosotros.

-¿Qué caracteriza a "Rabbit Don't Come Easy"?

-Que fue hecho completamente por Helloween, no hubo nadie retocando los arreglos. Todo el proceso fue hecho por nosotros y sólo por nosotros. Esa es la mayor diferencia con los discos anteriores. Musicalmente fuimos a las bases, al viejo y clásico estilo del grupo.

-Algunos los etiquetan como power metal, gótico o trash, ¿estás de acuerdo con estos rótulos?

-No nos importa cómo nos llamen. Nosotros hacemos rock metálico, con un montón de elementos clásicos del género. A todos nos influenciaron Led Zeppelin, Deep Purple, AC/DC, Kiss y Rainbow. Estamos orgullosos de pertenecer a la vieja escuela del heavy metal. Yo también vengo del punk, siempre escuché a los Sex Pistols, The Clash y XTC.

-¿Se ven como una banda clásica de los 80?

-Bueno, también estuvimos en los 90, tuvimos nuestros problemas pero nunca paramos de hacer nuestra música. Y siempre tuvimos nuestros oyentes y compradores, sacamos discos y nuestras giras son exitosas.

-¿Por qué creés que "Keeper of The Seven Keys Part I" (1987) es apuntado por la crítica como el mejor álbum de la banda?

-Es muy difícil de contestar desde adentro de la banda. En ese disco teníamos un nuevo cantante y empezamos algo que era muy fresco para Helloween. Pero siempre, a lo largo de los doce discos, tratamos de hacer lo mejor posible para su época.

-¿Cuál fue el momento más difícil del grupo y cómo lo superaron?

-Creo que fue cuando murió un ex baterista de la banda (Ingo Schwichtenberg), que se suicidó. Había que tener coraje para seguir sin él. También tuvimos problemas con la discográfica, pero ese es como cualquier otro problema. Igual nunca nos estancamos en esos momentos y tampoco metimos la cabeza bajo la arena haciendo que no veíamos los problemas. Los resolvimos y luchamos por lo que queríamos hacer. Nunca fue fácil para nosotros, pero sobrevivimos hasta sin compañía discográfica y sin cantante. Es cosa de reunirse, tener nuevas canciones y volverlo a intentar. Por ahora nos está funcionando.

-¿Cómo sobrevivieron a tantos cambios de formación?

-Creando un estilo propio más allá de los cambios de músicos. La gente puede identificar una canción nuestra sin confundirla con ninguna otra. Eso no es fácil de lograr.

-¿Y en el aspecto humano?

-Esa es una historia diferente, porque tenés que lidiar con gente con la cual a veces no querés estar. El negocio de la música está lleno de tipos que te dicen lo que tenés que hacer, lo que supuestamente te conviene, lo que te va a dejar más dinero. No es fácil convivir con eso, pero a veces lo tenés que hacer. Es la parte menos divertida del trabajo. Y en este ambiente te encontrás con gente de carácter muy agresivo. Algunos te dicen una cosa y a tus espaldas hacen otra. A veces uno tiene que mirar por encima de eso, hay que superarlo. Si querés tener éxito tenés que entrar en esa especie de juego y tratar de ponerlo de tu lado. Y también hay que aprender a decir no (risas).

-¿Son una banda popular?

-Depende de lo que se entienda por popular. Si es estar en la radio y en la MTV todo el tiempo, entonces no somos una banda popular. Pero si hablamos de vender muchos discos y hacer largas giras mundiales, somos muy populares.

-¿Qué opinás del nü metal, grupos como Korn, Deftones o Linkin Park?

-No es lo que me llega al corazón. No es que sea malo, pero no me moviliza para nada.

Andreas Deris y Michael Weikath.