| sábado, 13 de septiembre de 2003 | La superposición de congresos y actividades culturales puso al rojo la demanda Los hoteles de Rosario están nuevamente todos llenos El Etur tuvo que buscar esta semana alojamiento en otras localidades. Optimismo de los empresarios del sector Después de dos años de penurias, sobre los hoteles de Rosario comienzan a soplar buenos vientos. Por segunda vez en menos de 30 días la ciudad se quedó sin camas disponibles, y el Ente Turístico Rosario (Etur) tuvo que acudir a otras localidades cercanas en busca de alojamiento para pasajeros. La situación se normalizará recién hoy cuando culmine una serie de congresos que se desarrollan en Rosario.
Como sucedió el pasado 16 de agosto, cuando se realizaron simultáneamente el Encuentro Nacional de Mujeres y las Olimpíadas de Farmacéuticos, nuevamente la superposición de eventos colmó esta semana la capacidad hotelera local. Ahora, confluyeron el XVII Congreso de Oftalmología que se desarrolla en el Patio de la Madera, un simposio sobre almacenamiento de granos en el Parque España, unas jornadas pos cosecha de la Bolsa de Comercio y otra de epidemiología de la Asociación Médica.
Además, está la Feria Nacional de Maestros Artesanos en el Centro Cultural Bernardino Rivadavia y el Festival Latinoamericano de Video que comenzó ayer en el teatro La Comedia.
Entre todas estas actividades se calcula que Rosario recibió esta semana unos 3.500 visitantes, teniendo en cuenta que sólo el encuentro de oftalmólogos convocó más de 2.000 profesionales. Y esta suerte de seguidilla de congresos y encuentros culturales se extenderá durante todo el mes (ver aparte).
Para el titular del Etur, Raúl Garo, el fenómeno tiene dos explicaciones. Por un lado, agosto, septiembre y octubre son los meses pico para la realización de este tipo de eventos y al mismo tiempo "hay una actividad empresarial más intensa para posicionar a Rosario como organizadora de congresos".
Con este panorama, la perspectiva de la actividad hotelera se modificó sustancialmente. "Estamos llenos hasta el sábado (por hoy), y hasta tuvimos que rechazar pedidos de reserva porque no dimos abasto con las camas", indicó a La Capital el gerente comercial del Holliday Inn, Cesar Basetti.
Y lo mismo sucedió en los Appart Pringles y Alvear. "De martes a viernes tenemos todas las habitaciones ocupadas, las reservas bajan recién para el fin de semana, pero igual llegan al 75 por ciento", aseguró Daniela Zeitter desde la recepción del Pringles.
Los hoteles de tres estrellas tampoco se quedaron atrás. "Durante la semana logramos una buena ocupación y para el sábado y domingo (por hoy y mañana) ya tenemos reservada más de la mitad de las de las habitaciones", confirmaron en el Hotel Majestic.
Buenas perspectivas "Después de mucho tiempo, por fin conseguimos trabajar bien", festejó una de las titulares del Nuevo Europeo, Susana Suárez. "No hay parámetros para comparar la actividad con lo que fueron los dos últimos años donde varios hoteles tuvieron que cerrar y otros quedaron al borde de hacerlo", apuntó la mujer.
Es que, doce meses atrás "más de un congreso que ya estaba programado tenía que suspenderse porque no conseguían inscriptos y muchas empresas cerraron sus sucursales, por lo cual también cayeron los viajes de negocios", explicó Suárez.
Además, actualmente durante los fines de semana también se registra un mayor movimiento de pasajeros en plan turístico. "No te digo que sea como Venecia o San Martín de los Andes, pero hay mucha gente de Buenos Aires o del interior de la provincia que llega a Rosario para pasar un par de días a pasear, hacer shopping o ir al cine", agregó la titular del hotel Europeo.
En cambio el coordinador de la cadena Solans, Fernando Bach, no fue tan optimista. "Realmente lo que sucede es que los congresos se superponen, entonces durante dos o tres días los hoteles trabajan a full y el resto del mes quedan vacíos", advirtió.
Bach apuntó que si bien en Rosario existe una ordenanza que solicita a los organizadores de eventos comunicar al Etur las fechas en que se van a realizar actividades para poder coordinarlas, "nadie la cumple".
"A pesar de que hay gente trabajando para vender a Rosario como sede de congresos, todavía estamos lejos", consideró el coordinador de Solans, y advirtió que aunque la hotelería local es buena y barata todavía falta infraestructura para grandes eventos, como salones de exposiciones y ferias más amplios.
"Con tres o cuatro actividades que se suman en una semana no podemos hablar de que la ciudad esté bien posicionada. Todavía falta mucho", concluyó Bach. enviar nota por e-mail | | Fotos | | El último congreso convocó a 3.500 personas. | | |