| domingo, 31 de agosto de 2003 | ¿Te acordás hermano? Raúl Piraíno, el último centrojás Miguel Pisano / La Capital De centrojás. De eso jugaba Raúl Piraíno, este rosarino de barrio Triángulo que a los 70 años preside en forma interina la Mutual de ex jugadores del fútbol rosarino y se ha erigido en uno de los personajes más queridos del fútbol en los tiempos de la pelota con tientos. Dice que siempre fue flaquito, pero desde que tiene memoria todos lo conocen por un apodo tan gráfico como inapelable: La Chancha. Así, a secas, con la contundencia de un cross en la mandíbula, como diría el bueno de Arlt. Bien de barrio.
Nacido el 16 de diciembre del 32, La Chancha jugaba en el Club Triángulo, de Amenábar al 5200, pero, sobre todo, en cuanto torneo libre de 7 que florecía en los innumerables potreros de antaño. "Siempre jugué de centrojás, como le decíamos antes al 5, y empecé en el Club Triángulo, que ya no tiene cancha", cuenta Raúl, detrás de sus anteojos inconfundibles y de su cafecito inseparable, que ahora comparte con Ovacion, en este delicioso sábado de invierno.
"Yo jugaba con muchos muchachos que llegaron a ser grandes jugadores, algunos de los cuales ya no están. Jugadores como Belén, Yudica, Puppo, Alberto Ducca, Tulio Zof. Y contra grandes ídolos como Federico Vairo y Alejandro Mur", hace primera La Chancha, con su mejor carta de presentación.
-El Flaco Menotti dice que Alejandro Mur fue el mejor jugador que vio.
-Mi ídolo era Alejandro Mur, que tenía una habilidad bárbara. A Mur yo le he visto hacer cosas con la pelota que ni al mismo Maradona se las vi hacer. Yo estoy de acuerdo con el Flaco porque Mur era un jugador extraordinario: jugaba con las dos piernas, gambeteaba, cabeceaba. Verlo jugar te alegraba la vista.
-¿Es verdad que René, el hermano de Belén, jugaba mejor?
-Sí, es verdad. René Belén jugaba de 9 en Córdoba y era mejor que La Bruja, que era el más conocido.
-Hoy parece mentira que Provincial fuera un equipo más de Rosario.
-Puede ser, pero en aquella época Provincial era un equipo más de la primera de la Liga Rosarina. Yo jugué en Provincial en el 53 y en el 54, después lo hice en Chañar Ladeado y en el 55 me fui a Colombia, donde jugué en Unión Magdalena y América de Cali.
-¿La influencia de los jugadores argentinos en la época de El Dorado cambió al fútbol colombiano?
-Sí, totalmente. No porque haya estado yo, que era un tronco, sino por los grandes jugadores argentinos que emigraron a Colombia en la época de El Dorado, después de la huelga del 51. Y tan es así que al cambio lo reconocen los propios colombianos.
-¿Por qué El Dorado?
-Porque hubo una enorme cantidad de jugadores argentinos, más de 30, que emigraron a Colombia, entre los cuales había muchos rosarinos. José Fabrini dirigió al equipo que se llamaba Wanders Argentina, donde eran todos rosarinos, y después fundaron el Club Deportes Quindío, en la ciudad de Armenia, donde jugaron Pedernera, Moreno, Labruna y el Narigón Rossi, entre tantos otros.
-¿Y por qué el nombre?
-El Dorado porque ganaban mucha guita. Había buena plata, la relación era de 10 a 1. Entonces el fútbol colombiano era mediocre y los hinchas quedaron muy entusiasmados.
-¿Antes jugaban mejor?
-Había más habilidad, pero también era porque te dejaban jugar, y el fútbol era más bello. Ahora el juego es más rápido y de fuerza, por eso los pibes llegan antes a la primera porque ganan por lo que corren.
-¿Qué significa el fútbol?
-Es la pasión de mi vida. Yo siempre viví para el fútbol, a tal punto que no iba ni a la milonga. Me inicié en los campitos de barrio Triángulo con la pelota de trapo, después la de goma, la de tiento y la de pinche, con inolvidables amigos con los que chapaleábamos en el barro de las calles de tierra. enviar nota por e-mail | | Fotos | | La Chancha Piraíno en la Mutual de ex jugadores. | | |