Aznar eligió a su vice como candidato oficialista para los comicios de 2004

El gallego Mariano Rajoy será el hombre del Partido Popular en las elecciones presidenciables españolas

Sara Barderas

Madrid. - El jefe del gobierno español, José María Aznar, develó ayer durante una comida en el Palacio de La Moncloa -la casa de gobierno- el nombre del elegido para competir por la presidencia en las elecciones de marzo de 2004. Mariano Rajoy, el vicepresidente primero del gobierno, será el presidenciable del Partido Popular, informaron fuentes cercanas a las presidencia.

Rajoy nació en Santiago de Compostela -la capital gallega- el 27 de marzo de 1955. Está considerado como uno de los hombres más dialoguistas y abiertos del gobernante Partido Popular (PP). Aznar, que comparte un fin de semana de trabajo con Rajoy en la finca estatal de Quintos de Mora -en Toledo- ultimando los detalles sobre el cambio de posta, propondrá la candidatura del vicepresidente primero al Comité Ejecutivo Nacional del PP, máximo órgano de dirección del partido, mañana, 1º de septiembre.

Un día después se reunirá la Junta Directiva Nacional de la formación conservadora, en la que los más de 500 dirigentes "populares" -entre presidentes autonómicos, diputados y senadores- deberán votar la aprobación del nombre. Desde el viernes y en numerosos contactos personales y telefónicos, el jefe del Ejecutivo, cuya decisión de no volver a concurrir a la presidencia era firme desde 2001, está pidiendo a los dirigentes de su partido que confíen en su propuesta, según fuentes del PP.


Tres para una candidatura
Aunque oficialmente no había candidatos, desde hace meses se barajaban junto al de Rajoy los nombres del ministro de Economía, Rodrigo Rato, y del ex ministro del Interior y líder del PP vasco, Jaime Mayor Oreja. Sonaron también otros como los del alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, y el del ministro de Interior, Angel Acebes, pero fueron perdiendo fuerza.

La revelación del secreto mejor guardado de los últimos tiempos en España provocó ayer todo tipo de reacciones. El propio Rato, que junto a Rajoy, Mayor Oreja y el secretario general del PP, Javier Arenas, participó en la comida en la que Aznar dio a conocer el nombre del candidato, dijo sentirse "muy contento" con la decisión, que respalda "totalmente".

Es "un acierto de Aznar", comentó el ministro de Defensa, Federico Trillo, mientras que Arenas aseguró que el gallego es un "candidato ganador".

Los que también parecían contentos con la designación de Rajoy eran los líderes de la oposición. Así lo expresó, al menos, el secretario general del Partido Socialista (PSOE), José Luis Rodríguez Zapatero. Otros dirigentes socialistas, entre ellos el secretario de Organización, José Blanco, manifestaron que Rajoy será "un buen líder de la oposición" tras los comicios de marzo.

El vicepresidente primero es el "candidato ideal" por su "bajo perfil interno" en el PP, manifestó el coordinador general de Izquierda Unida (IU), Gaspar Llamazares. La designación del nuevo líder del PP se adelantó a lo previsto. En el partido se esperaba el nombramiento para las últimas semanas de septiembre o incluso las primeras de octubre.

El adelanto facilita que el nuevo candidato participe desde el principio en la campaña de las elecciones regionales de Madrid, que el viernes fueron convocadas para el 26 de octubre. Mientras tanto, el proceder de Aznar para designar al candidato que lo sucederá de cara a las elecciones de marzo despertó también críticas de "autoritarismo" y falta de democracia interna de partido.

El portavoz del partido catalán Esquerra Republicana (ERC) Joan Ridao señaló que la elección del candidato muestra un talante "autoritario y poco democrático" tanto por parte de Aznar como del PP. El portavoz de Iniciativa per Catalunya Verds (ICV), Joan Boada añadió el calificativo de "chocante". Aznar -jefe del gobierno desde 1996- anunció en 2001 que no repetiría como candidato del PP en los próximos comicios legislativos y ratificó su decisión en el congreso que la formación celebró en enero de 2002.

A partir de la semana que viene, el PP tendrá en la práctica dos líderes. Aznar, de 50 años, ocupará la presidencia del partido hasta el congreso que la formación celebrará en 2005. El partido conservador no elige candidato a La Moncloa desde hace 14 años, cuando la Junta Directiva Nacional proclamó al actual jefe de gobierno, en septiembre de 1989. (DPA)