El actor habló de su temor a los ascensores y los túneles

Woody Allen: "Soy neurótico de un modo apacible"

El cineasta neoyorquino se confesó en Venecia, donde presentó su última película, "Anything Else"

Nicola Christie /Especial / La Capital

Woody Allen le teme a los ascensores, los túneles e incluso a algunos tipos de desagües de duchas. Algunas personas podrían calificarlo de neurótico, y así se autodefine el director estadounidense.

"Soy neurótico de una manera apacible. Quiero decir que tengo muchos hábitos neuróticos", dijo a Reuters Television el estrafalario director y actor. "No me gusta ir en ascensores, no atravieso túneles, me gusta que el desagüe en la ducha esté en la esquina y no en el medio", agregó Allen en una entrevista tras exhibir su nueva comedia "Anything Else" en el Festival de Cine de Venecia.

Sumiedo a los ascensores obligó al reparto, entre los que destacan Christina Ricci y Jason Biggs, subir tres tramos de escaleras para una rueda de prensa antes de la premier en el Lido.

"Corto un plátano en siete rebanadas cada mañana antes de ponerlo en mis cereales", dijo el creador de personajes insólitos como Isaac Davis en la comedia romántica "Manhattan" (1979). "Estas cosas no hacen daño a nadie más, pero son (obsesiones) neuróticas".

Sus personajes genialmente inestables, con frecuencia interpretados por él mismo, sufren una gama de fobias, miedos y neurosis, con frecuencia buscando soluciones en el diván del psiquiatra.

En su nueva comedia romántica, Allen, de 67 años, encarna a David Dobel, un viejo profesor neurótico que ve complots antisemitas en todas partes. Pero su personaje es más que excéntrico. Sus miedos reprimidos lo han hecho paranoico e incluso violento.

Allen delegó el papel protagónico masculino a Biggs, de 25 años, que hace de un aspirante escritor de comedias enamorado de la impredecible Amanda, interpretada por Ricci.

"No quería ceder la chica a otro, pero era demasiado viejo para interpretar ese papel", dijo Allen.

"Tuve que dejar a Jason interpretar el papel que me hubiera gustado hacer. Podría haber hecho el tonto con (la chica) durante algún tiempo, lo que habría sido más divertido que dar todos esos paseos por el parque". Su personaje, Dobel, pasa mucho tiempo en el Parque Central de Nueva York dando consejos a su joven protegido, interpretado por Biggs.

"El personaje de mi filme, un hombre bueno pero transformado por años de persecución religiosa y social es como Israel. Un país maravilloso cuando nació pero que ha sido perseguido, atacado sin tregua, por lo que se convirtió en un país polarizado, que responde en modo no justo", declaró Allen.

El director de "Disparen sobre Broadway", capaz de ironizar y alabar su educación y cultura judía en sus películas,autodefensa ante las tensiones religiosas del mundo actual. "Las partes en Medio Oriente no se han comportado bien, hubo una actitud negativa para acoger un país tan joven. La actitud negativa hizo que el país se encerrara en sí mismo y respondiera a todo en forma agresiva, como el personaje de mi filme, un paranoico, un neurótico, cuya suerte no se conoce", aseguró.

Allen dijo que está trabajando en una nueva "comedia seria", pero los intentos por atraer a Robert Downe y Jr. han fracasado, por lo que aún seguía buscando a los actores adecuados.

Allen, acompañado por su esposa en Venecia.