Estuvieron paralizadas durante 15 meses

Al fin, se retoman las obras para remodelar el Aeropuerto de Rosario

Se invertirán más de diez millones de pesos para los trabajos que restan. En ocho meses deben finalizar

Isolda Baraldi / La Capital

Las obras en el Aeropuerto Internacional Rosario (AIR) se retomarán finalmente hoy después de que se paralizaran en mayo de 2002 por la devaluación. Las autoridades provinciales firmarán un acta con la empresa contratista Pellegrinet-Pecam (UTE de capitales locales) en la que se actualiza el costo de los trabajos pendientes, que ahora asciende a 10.500.000 pesos. La directora del ente administrador del aeropuerto, Sandra Callegari, aseguró que en abril de 2004 la estación aérea finalmente lucirá nueva. "Ya hay movimiento de la constructora, pero a partir de mañana (por hoy) se trabajará a pleno", apuntó.

De este modo, se terminará la ampliación del edificio de la estación que contará con una superficie total de 10.787 metros cuadrados, es decir que triplicará la actual de 3.207.

"Se continuarán las obras en la planta baja, todo el sector administrativo, el hall central y el área internacional", explicó la funcionaria, y agregó que una de las prioridades es despejar la entrada que actualmente está tapialada con chapas.

La remodelación del aeropuerto comenzó en marzo de 2001 bajo la administración del ahora candidato a vicegobernador Esteban Borgonovo. El megaproyecto prometía revitalizar toda la infraestructura que durante años no había sido intervenida, pero en el 2002 quedó paralizado. Durante ese período la empresa contratista ejecutó el 47 por ciento de la obra, que abarcó fundamentalmente los trabajos en la estructura de hormigón, las metálicas, demoliciones y carpintería de aluminio y vidrios. La obra paralizada y la interrupción de distintos vuelos de cabotaje dieron durante un tiempo a la aeroestación una imagen desoladora.


Volver a empezar
A partir de hoy se retomarán los trabajos que incluyen la puesta en marcha del sistema de calefacción (frío-calor), construcción de sanitarios, limpieza y remodelación de la fachada externa, además de las instalaciones eléctricas, de audio y video, telefonía y protección contra incendio.

La planta baja tendrá un corredor vidriado de 170 metros de largo que comunicará el sector cabotaje, internacional y hall central. Para no anular la actividad aeroportuaria por la obra se utilizarán elementos de fabricación en serie y de ejecución y montaje en seco.

Allí funcionarán embarques y desembarques de pasajeros, cargas, free shop, bar, oficinas administrativas y negocios. La conexión con la planta alta se hará a través de ascensores y escaleras mecánicas.

En tanto, en el primer piso se instalarán las oficinas de las empresas de transporte aéreo, del personal de la Fuerza Aérea, la administración provincial y los organismos oficiales que intervienen en la actividad aeroportuaria. También se habilitará un espacio de circulación y vista a la pista integrado al restaurante y confitería.

Claro que no quedan pocas cosas por resolver más allá de la finalización edilicia de la aeroestación. "Estamos haciendo gestiones para que la empresa Southern Winds (SW) retome sus vuelos a Córdoba, ya que para nosotros es una ruta estratégica", afirmó Callegari.

También la funcionaria destacó que los viajes internacionales que diariamente realiza Lan Chile "son un éxito". Otra de las tareas pendientes es volver a poner en funcionamiento el free shop, que en Rosario tuvo corta vida. "Cuando esté terminado el edificio podremos volver a licitar el negocio, y otros emprendimientos económicos", aseguró Callegari.

La modernización había quedado frenada.