| domingo, 03 de agosto de 2003 | Rugby del Litoral: Universitario le ganó a Jockey Club Aníbal Fucaraccio / La Capital La realidad del torneo Regional del Litoral no deja de sorprender con su sana y esperada irreverencia. La nivelación de los equipos de punta es un axioma establecido con tal arraigo en el certamen doméstico que desechó sin prejuicios los resultados previsibles de otros tiempos y aumentó considerablemente las posibilidades de aquellos que estaban acostumbrados en el pasado inmediato a observar por la ventanilla de la resignación la manera en que pasaba de largo la estación del protagonismo escénico.
Ayer, Universitario se aprovechó de estas curiosas circunstancias que gobiernan la Zona Campeonato y dio su "gran golpe". Consiguió el triunfo impactante que necesitaba para terminar de reafirmar y confirmar su muy buena temporada. Después de muchos años torció una racha histórica negativa, hizo pata ancha en terreno ajeno y con un notorio apetito de éxito logró vencer al poderoso Jockey Club en las cuatro hectáreas por 23 a 16. De esa manera se ubicó en la tercera posición, obligó a los verdiblancos a colocarse a sus espaldas y perfiló con una actuación solvente sus turgentes ansias de gloria para las semifinales que se avecinan
El arranque del encuentro mostró que Uni salió a buscar su partido en campo enemigo. Sorpresivamente comenzaba los movimientos con una tarea muy prolija y criteriosa de los forwards, ganaba metros por esa vía y abría la pelota cuando existían ventajas evidentes. Así, sin estridencias pero con sustento estructural, la visita era la dueña de la pelota y contaba con las mejores chances.
Jockey contestaba airadamente con su mayor dinámica y con un trabajo muy efectivo en la limpieza de los rucks. El scrum era su fuente más segura de obtención pero su discontinuidad atentaba contra sus aspiraciones.
En ese contexto, sólo los penales y la irregularidad de los pateadores quebraban la monotonía de un enfrentamiento muy intenso pero de bajo vuelo técnico. Hasta que a los 17', luego de una jugada muy desprolija, Jockey anotó a través de De Luise, quien aprovechó una salida muy sucia de la pelota en un reagrupamiento.
En los primeros 40 minutos los locales fueron menos audaces pero mucho más efectivos que su rival. El partido fue levantando temperatura, los roces se multiplicaban sistemáticamente y entonces la aparición de las tarjetas fue una consecuencia inevitable. Y el más pejudicado fue Jockey, que sufrió por propios excesos la expulsión de Piky Woelflin antes del cierre del parcial inicial.
Uni jugó todo el complemento con un hombre más. Y demostró -con más esfuerzo muscular que con ideas productivas- que supo aprovechar esa situación favorable para sacar réditos. A los 11', los de Las Delicias ya habían apoyado dos veces (a través de Rivas y Schiavo) y fueron estableciendo una diferencia apreciable en el marcador.
Jockey salió, orgulloso y herido, a buscar una reacción que se esbozó con el try del pilar Sauan. Pero enseguida Uni ratificó que era su tarde soñada cuando Caterina se cortó por el centro de la cancha y habilitó a Sánchez para que se consumara una victoria definitivamente inolvidable y merecida. enviar nota por e-mail | | Fotos | | Moliné le aportó criterio e intuición a su equipo. | | |