Kirchner, Obeid y Nicotra

Una vez más, la Argentina reivindicó su soberanía y el monopolio nacional para insultarnos entre nosotros, obligando al desfogado ministro paraguayo, Burró, a renunciar. En este aspecto hay que ser justos, nuestros gobiernos nunca han permitido, reaccionando con bravura, que extranjeros notorios compitan con los autóctonos en proferir agravios destinados a los argentinos. Ni el lamebotas de Castro

-aunque todos saben que Fidel está craquelé- ni las desmesuras de O'Neill cuando era secretario del Tesoro norteamericano, ni los exabruptos de Batlle presidente de Uruguay, que lavó con lágrimas, ni las palabrotas de Wasmosy cuando presidía Paraguay -sorprendido usando un BMW robado igual que el intendente radical de Quilmes, Geronés- quedaron impunes.

Esto me hace acordar a mis adorables tiempos de niñez cuando el Cholo Bassini, enojadísimo con su hermana de 18 años, una diosa, porque desaparecía a cada rato, chillando con calificativos que ahorraré, hasta que el Chiche Leguizamón le dijo: "Mi mamá casi lo mata a mi papá porque lo pescó con tu hermana". Entonces el Cholo le dio un bife tipo cuota Hilton diciéndole: "con mi hermana no te metás, te voy a dejar sin dientes".

Como si hiciera falta un ministro paraguayo para descalificar a todos los estamentos argentinos y encima tímidamente ("sinvergüenzas"), si este país nuestro tiene décadas de pulverizar a sus gobernantes, políticos, sindicalistas, empresarios, jueces, policías, militares, profesionales, periodistas, sacerdotes, rabinos, ganaderos, exportadores, empresas públicas o privatizadas. Como dijo aquella vez Alfredo Vítolo, el más notable ministro del Interior: "¿Hasta cuándo nos vamos a meter presos los unos a los otros?".

20 mil libros, 20 mil palabras

Encima se descalifica por entrenamiento como le sucede a mi amigo Zaffaroni. Los que reclaman no remover el pasado lo atacan por su pasado; los que exigen no condenar jueces por sus sentencias le sacuden dos de sus cinco mil fallos; los que piden para la Corte jerarquía académica se hacen los distraídos ante su incomparable nivel; los que se escandalizan por meterse en la vida íntima de las personas hablan de su intimidad; los que lo acusan de propiciar penas bajas lo acusan de haber escrito que en determinadas circunstancias hay que ser implacable. Zaffaroni tiene un problema: se está mudando y no sabe cómo trasladar sus 20.000 libros. Pobre amigo agredido por tipos que no leyeron en su vida 20.000 palabras.

Así somos. Anteayer Kirchner se salvó porque el helicóptero que puso a su disposición el gobernador de Salta, Juan Carlos Romero, eximio piloto, estaba a cargo de un maestro. No ocurrió una desgracia por la destreza del piloto para evitar que el cholulaje de treparse a la nave junto al presidente produjera un desastre. Lo mismo le ocurrió a Menem, solo que el Turco no tuvo esa suerte, se desplomó sobre una vivienda. Ahora vea: todos contra Menem, pero Zaffaroni produjo un dictamen cuando Charli estaba preso fulminando la asociación ilícita que le imputaban y quedó libre. Y su compañero de fórmula Romero, ayer, hizo de copiloto en tan delicadas circunstancias. Como dicen los norteamericanos cultos, "siga al mainstream".

Reutemann declara que nunca fue menemista ¿con quién comíamos pizza con champaña en Olivos? Charly García no se dio vuelta según un reportaje en la revista Veintitrés donde Kirchner no dice mucho pero sí algo esclarecedor: "en una sociedad como la nuestra existe variedad de opiniones y no creo que esa variedad se base en la maldad de quien opina diferente, yo pienso bien y mi tarea es escuchar lo que me gusta y lo que no me gusta".

Es más, humildemente, diría que un presidente debe prestar más atención a lo que no le gusta, especialmente éste, que asumió sin votos y hoy disfruta del 80% de aceptación popular, único capital valedero para las grandes transformaciones. No es recomendable, por ejemplo, solazarse con las estadísticas tipo Lavagna según las cuales corremos al pleno empleo y van quedando pocos pobres, porque esta metodología de amañar sondeos es peligrosa, se parece a las encuestas que Murillas le hace a Reutemann, quien conoce otra mucho más seria, que resumo. Pregunta: ¿a quién votaría, para gobernador, al candidato de Kirchner o al de Reutemann?. El 30% dijo al de Kirchner y el 17% al de Reutemann. Por eso, a partir del viernes usted verá la pantalla de su televisor saturada de spots presentando a Hammerly al lado del Lole y como esto se filtró, Obeid no demorará en hacer algo semejante solo que junto al político más popular de la Argentina actual y con argumentos no menores como la posibilidad de que, por primera vez en esta provincia, una mujer presida la Cámara de Senadores de la Argentina. Que tiene un catálogo de problemas cuya magnitud obligaría a pedir socorro porque sin inversiones, sin crédito, sin tranquilidad en los vencimientos de la deuda, sin promoción de los servicios públicos vamos a vivir de anécdota en anécdota.

El mundo no es nuestro, en todo caso -y ya no- es ancho y ajeno. Si el Senasa inhabilita frigoríficos y la piedad de un juez los favorece con un amparo, hablamos entrecasa, por eso, la Unión Europea no admite envíos de Estancias del Sur y Fricop ¿desde cuándo un magistrado sustituye al organismo técnico? Es voluntarismo. Recuerde cuando Kirchner hábilmente aprovechó que en Surrey, cumbre progre, Blair salió a tomar aire fresco al jardín y le reclamó las Malvinas obteniendo un gestito de Tony. Ahora llegó la contestación vía Bill Rammell, ministro británico para América latina: "No habrá negociación por las islas que seguirán siendo británicas mientras sus ocupantes así lo deseen".

Porque Gran Bretaña es laborista, progresista, tercera vía, antiimperialista, descolonizadora y generosa, pero "business are business" y es imprescindible asimilarlo para saber actuar. De lo contrario, caeremos en solipsismo ese berretín que le hace creer a Marcelo Romeu que es un hombre de la cultura porque ejerce en Rosario la secretaría municipal y viajó a España con la delegación argentina que prepara el Congreso de la Lengua Española a realizarse aquí dentro de un año.

Romeu está en el cargo no por su cultura sino porque fue chofer de Estévez Boero, según el procedimiento de la estudiantina que gobierna Rosario, apegada a la farándula universitaria en un mismo negocio. Celebro que la Bolsa de Comercio promueva el programa ferroviario Circunvalar interesando a nuestros senadores nacionales en el más formidable emprendimiento que libera 600 manzanas rosarinas, elimina el corsé de hierro que la oprime, reconstituye el transporte polimodal y en suma, transforma la ciudad y su entorno. Este proyecto, estructurado en el Enabief hoy Onabe, lo impulsé con autoridades nacionales hace unos años y lo enterró la comparsa socialista. El Concejo Municipal a mi pedido lo estimuló pero Binner, Palumbo, Lifschitz, Bonet, Blanco y otros lo sepultaron por la miopía propia de la fiesta estudiantil y lo mandaron a Giani, hoy candidato a intendente, a ridiculizarlo públicamente. Festejo que la Bolsa de Comercio lo rescate.

Trilogía armónica

Como van las cosas, diciembre nos encontrará con tres gobernantes en sintonía, Kirchner presidente, Obeid gobernador y Nicotra intendente. En estos 20 años, nunca tuvimos una trilogía armonizada políticamente con las consecuencias que exhibe esta ciudad victimizada por el desgobierno y el infantilismo. Si este cuadro gubernamental se perfecciona como todos los indicadores parecen concurrir con la única resistencia de Reutemann que

-es comprensible- teme pasar de máximo presidenciable en marzo, al aislamiento en diciembre con vistas a un marzo que en esta corriente, lo dejará afuera del PJ en la provincia. Es penoso, porque si alguien generó confianza es Reutemann, víctima hoy de una campaña sucia promovida por socialistas tal como se denuncia, pero la política es muy compleja como para suponerla desecable, como la leche que se vende en polvo. Es un chiste cruel del socialismo de afiches, obligando al sector de Cavallero a salvar en septiembre a 10 militantes de su elite y al otro, el de Binner, a seguir hasta el final intentando vendernos fantasías, desde hospitales hasta pavimentos pasando por los tranvías suizos. Es cruel porque -es el más grave dato de la realidad nacional- lo que consiguieron es que Rosario exhiba hoy trágicamente el más alto índice de marginalidad de los grandes aglomerados. Depende del buen tino de los electores dentro de 35 días que la concurrencia de los tres Ejecutivos en consonancia

-Kirchner, Obeid y Nicotra- actuando con otras fuerzas en productividad sincrética, terminen esta diversión perversa y tras reparar el daño movilicen las potencias que laten en nuestra sociedad.