El presidente prometió que visitará la muestra la semana próxima

La Rural inaugura hoy sin Kirchner

Miguens dijo que hubiera sido "bien recibido". La exposición de Palermo bate récords de público y expositores

Las tribunas de Palermo volvieron a despertar polémica. Desde la silbatina a Raúl Alfonsín, pasando por los elogios a Carlos Menem, hasta la silbatina al ex secretario de Agricultura Rafael Delpech, el juicio del sector de dirigentes ganaderos que asiste año a año a la inauguración de la exposición organizada por la Sociedad Rural Argentina fue durante muchos años un fantasma para los presidentes civiles.

Esto hasta que en los últimos años, desde los gobiernos de turno se comenzó a sopesar la representatividad de la entidad con el riesgo de un mal trago. Así, Eduardo Duhalde no asistió el año pasado, y el presidente Néstor Kirchner decidió extender con los ruralistas su decisión de no asistir a foros empresarios, con excepción de los que se realizan en Estados Unidos.

La decisión movilizó a los dirigentes de la tradicional institución, que a partir de la gestión de Luciano Miguens intentan dejar atrás el compromiso de la Rural con el menemismo que supo exhibir el anterior titular Enrique Crotto. A tal punto, que Miguens insistió durante varios días en que Kirchner sería "bien recibido" en la inauguración de Palermo.

Esa garantía no alcanzó para torcer los "problemas de agenda" que exhibió el presidente, que sí recibió el jueves por la noche al presidente de la Sociedad Rural, junto al ministro Lavagna. Finalmente, la situación se salvó con una promesa de kirchner de asistir a la muestra en el transcurso de la próxima semana. En el acto de hoy lo reemplazará el vicepresidente Daniel Scioli, quien concurrirá ju nto al secretario de Agricultura, Miguel Campos.

"Kirchner está en un momento favorable de su gobierno, lo iba a recibir un público seguramente muy entusiasta", aseguró el directivo, quien destacó la "actitud" del presidente de convocarlos a Casa de Gobierno para explicarles personalmente los motivos por los cuales no iba a estar el sábado en Palermo.Como saldo positivo del encuentro, Miguens subrayó la posibilidad de haber tenido la oportunidad de conocer la opinión de Kirchner "acerca de algunos otros temas del campo y su promesa de que va a tratar de hacerse presente" antes de que termine la muestra el próximo 5 de agosto.

En rigor, la polémica por la ausencia del presidente en la inauguración de la muestra no se limita al peso de la tradición. Desde el sector agropecuario, que se considera a sí mismo como un complejo que contribuyó a estabilizar las variables económicas desde la crisis de 2001, esperaban alguna señal de aliento de parte del gobierno, sobre todo teniendo en cuenta los cortocircuitos que tuvieron con Roberto Lavagna por el tema impositivo.

Miguens sostuvo que se esperaba cuanto menos "palabras de estímulo" para con el campo, que "tanto aporte genuino hizo al país en aras de la recuperación económica que necesitaba y aún necesita".

Desde Confederaciones Rurales Argentinas (CRA) se cuestionó severamente la decisión del gobierno, al señalar que "ni siquiera se piensa en una reducción gradual de las retenciones y la pesada carga impositiva que tenemos".

En cambio, desde la Federación Agraria Argentina, Eduardo Buzzi, le quitó relevancia al asunto. Dijo que la Rural "representa sólo a un sector de los productores" y ubicó la decisión presidencial "en su política de diferenciarse del menemismo".

Más allá de la discusión política, la muestra de Palermo volvió a exhibir, como en la edición del año pasado, el éxito de la apuesta que hizo su conducción de volver a las fuentes, revitalizando la exposición como una muestra específica del sector agropecuario. Hay récord de público y también de expositores. Y pasaron por el predio los principales funcionarios y empresarios vinculados a los agronegocios.

En el terreno de las conferencias y foros de discusión, sobresalieron las discusiones entre representantes de la Unión Europea y Estados Unidos sobre los subsidios, las charlas sobre trazabilidad y exportaciones y los seminarios sobre gestión empresaria en la cadena ganadera y láctea.

En el marco de la muestra, el presidente del Senasa, Bernardo Cané, recordó que "es imprescindible recordar que el consumidor es quien manda" y admitió que si bien numerosos requisitos que exigen desde el mercado externo "parecen injustos" no queda otra que cumplirlos.

En ese contexto se refirió a la marcada diferencia que existe entre los valores de la carne vacuna entre Australia y Argentina, por ejemplo, ya que en el primer caso, "existe estabilidad sanitaria en la región y eso, tiene un precio", acotó, tras lo cual se refirió a las estrategias regionales de sanidad, para "no perder los espacios recuperados en el mundo comercial cárnico", sostuvo.

La Exposición Rural de Palermo es un éxito.