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 miércoles, 30 de julio de 2003

Misterioso crimen en un country de Don Torcuato
Una copera mató de un tiro a un abogado
Estaban junto a un escribano y otras dos alternadoras con quienes se habían conocido horas antes en un bar

Buenos Aires.- Un abogado fue asesinado de un escopetazo en una casa del barrio privado Hindú, de Don Torcuato, en la que se hallaba junto a un escribano amigo y tres jóvenes acompañantes ocasionales, una de las cuales fue detenida.

Víctima del crimen resultó Jorge López Olbea, quien recibió una perdigonada en el pecho disparada presuntamente por una joven que había conocido horas antes y con quien había mantenido una fuerte discusión por motivos que aún se desconocen.

La policía confirmó que la mujer, llamada Solange María Belén Inoue, de 24 años, quedó detenida acusada de homicidio. En tanto, las otras dos mujeres que se encontraban dentro de la casa cuando ocurrió el hecho y que escaparon del lugar, ubicado en Esmeralda 383 de Don Torcuato, no quedaron imputadas en el caso.

Una alta fuente judicial confirmó que todo empezó cuando el escribano Ricardo Luis Maquiavelo, de 59 años, se encontró en la confitería La Biela, de avenida Quintana y Junín, con su amiga Inoue. Desde allí, Maquiavelo conversó telefónicamente con su amigo Olbea y acordaron encontrarse en la puerta de la whiskería Puerto Colón, también de la Recoleta.

Maquiavelo, Inoue y Olbea ingresaron al boliche, consumieron varias botellas de champagne y conversaron con dos coperas (prostitutas), a quienes invitaron a continuar la noche en la casa del escribano, en el barrio privado Hindú de Don Torcuato.

Según los investigadores, Maquiavelo era habitual concurrente de esa whiskería y conocía a las dos "acompañantes" que se sentaron a su mesa. Allí se produjo el episodio que es considerado clave por los investigadores y que aún no pudo ser esclarecido: Olbea e Inoue mantuvieron una fuerte discusión (presuntamente por cuestiones de dinero), tras la cual la chica se desmayó y debió ser atendida en el lugar.

De acuerdo a lo que lograron reconstruir los pesquisas, poco después los dos hombres y las tres mujeres se subieron al Mercedes Benz de Maquiavelo rumbo a Don Torcuato, donde el escribano posee una casa de 700 metros cuadrados. En una de las habitaciones del lugar ocurrió el crimen, justo en el momento en el que el dueño de casa había salido a pasear al perro.

Según el testimonio de Marina, una de las coperas que la tarde de ayer se presentó ante el juez que investiga el hecho, en ese momento Inoue abrió un placard, extrajo una escopeta calibre 12 de dos caños, cargó un cartucho, y disparó contra Olbea. "Lo maté, lo maté", fueron las únicas palabras que pronunció la mujer, tras lo cual apoyó la escopeta contra una pared y se quedó en el lugar a la espera de la policía.

En tanto, las otras dos chicas huyeron del lugar ante el temor de que les pudiera pasar algo. Salieron corriendo y, al pasar por el puesto de vigilancia, dijeron únicamente que venían de la casa del escribano, lo que despertó las sospechas de los custodios. Ellos fueron quienes se acercaron hasta la casa y llamaron a una ambulancia, ya que el dueño del lugar se encontraba totalmente desconcertado.

Olbea murió tres horas después en el Hospital de Tigre, mientras era asistido a raíz de graves lesiones que sufrió por la perdigonada que recibió en el abdomen.

La policía que llegó al lugar del crimen detuvo a Inoue, mientras que trasladó también a la seccional al escribano Maquiavelo para que narrara lo ocurrido, aunque el hombre aseguró no saber por qué la mujer disparó contra su amigo, ya que él no estaba presente en la habitación.

Horas más tarde, la policía localizó a una de las coperas del boliche Puerto Colón en una casa de Capital Federal y la llevaron ante el fiscal de Tigre, John Broyad. Allí contó lo ocurrido y dijo que se fue del lugar porque temía que le dispararan a ella también. Fuentes judiciales explicaron que la mujer negó conocer a la agresora y afirmó que sólo conocía al escribano Maquiavelo, a quien veía asiduamente.

Según pudieron establecer los investigadores, el escribano y las tres mujeres habían consumido mucho alcohol durante toda la noche, pero Olbea solamente había tomado unas copas de champagne. (Télam)

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La joven acusada por el crimen.

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