La agresión continúa

Pasado ya un tiempo prudencial de los lamentables sucesos ocurridos en la Facultad de Derecho de la UNR, que asimismo afectaron al Museo de Ciencias Naturales Angel Gallardo, lo que permite mayor objetividad, esta Asociación de Logopedia, Foniatría y Audiología del Litoral, a través de su Comité Científico Interdisciplinario de Ecología y Ruido, desea hacer algunas reflexiones. Desde su creación, hace más de cuarenta años, los profesionales miembros de la institución han venido insistiendo, cada vez, con mayor énfasis, sobre los peligros de las "guerras acústicas" como forma de demostrar poder, ya sea en reclamos, competencias deportivas y presentaciones musicales, que rivalizan en intensidades sonoras. Justamente nuestro comité ha acuñado el término "violencia acústica" por considerar que el ruido es una verdadera agresión, que no solamente afecta el oído sino que la onda sonora, de carácter físico, golpea al individuo que acusa el impacto, desde lo orgánico hasta lo emocional. La contaminación acústica intensa, en esta oportunidad producida por bombas de estruendo, deteriora la salud del ser humano y altera su psiquismo generando, entre otras, reacciones agresivas con impredecibles consecuencias. El medio ambiente, los ecosistemas y los bienes urbanos se encuentran expuestos ante estas manifestaciones sonoras que perjudican también por las vibraciones que producen. El ruido en este caso se cobró una nueva víctima, patrimonio de todos los ciudadanos, valiosa en lo arquitectónico, histórico y cultural. Es de lamentar la pérdida irreparable que pudo haberse evitado.

Asociación de Logopedia, Foniatría y Audiología del Litoral